El actuar humano es extraño, normalmente, irracional. Al igual que los murmullos del viento que viene y se va cuando le nace, que cambia su destino cuando le place.
La diferencia es que el susurro del viento intentará advertirte aunque no lo entiendas, aunque no lo sepas...
El susurrar del viento es un simple espectadora que jamás hará de tu sufrimiento un show.
El actuar humano, es irracional. Como el susurrar del viento que viene y se va.
Pero la diferencia es que el susurrar el viento no puede apuñalarte por la espalda, clavarte una estaca.