Souhaitex

Esta sola en su sala y hace frío. La fiesta terminó y el vino está vacío. La ebriedad se escapa y deja un vacío oprimente en su lugar.
          	Es poco relevante cuántas o quiénes la hayan probado, si al final de la noche ansia con impaciencia el jadeo calentando su jugularis.
          	La clave de Fa sube al monte de Venus y se abre paso.
          	La clave de Sol reprime el grito.
          	Antes de desaparecer cantale al oído canciones de cuna, mentiras blancas que luego no pueda recordar. Cuentale sobre los astros, llévala a conocerlas.
          	Traga una tras otra. Desea tocarlas, poseerlas.
          	Sé que vas a odiarla cuando la saques mojada de la bañera. Toca el agua, ve que esta tibia.
          	Recuestala en el suelo y contempla su desnudez. 
          	Diles que ya no quiere quedarse, pero que promete despedirse.
          	Acaba de cruzar la línea. El tiempo se detiene, el cosmos entra en colisión.

Souhaitex

Esta sola en su sala y hace frío. La fiesta terminó y el vino está vacío. La ebriedad se escapa y deja un vacío oprimente en su lugar.
          Es poco relevante cuántas o quiénes la hayan probado, si al final de la noche ansia con impaciencia el jadeo calentando su jugularis.
          La clave de Fa sube al monte de Venus y se abre paso.
          La clave de Sol reprime el grito.
          Antes de desaparecer cantale al oído canciones de cuna, mentiras blancas que luego no pueda recordar. Cuentale sobre los astros, llévala a conocerlas.
          Traga una tras otra. Desea tocarlas, poseerlas.
          Sé que vas a odiarla cuando la saques mojada de la bañera. Toca el agua, ve que esta tibia.
          Recuestala en el suelo y contempla su desnudez. 
          Diles que ya no quiere quedarse, pero que promete despedirse.
          Acaba de cruzar la línea. El tiempo se detiene, el cosmos entra en colisión.

Souhaitex

12/11/20 17:29pm - 12/11/21 02:00am
          
          Tiempo atrás, llegué a mi casa con la expansión en mis pupilas.
          Me senté en el piso del living y dejé que lloviera, a oscuras. 
          Aquella sábana negra que solía utilizar como backdrop era el portal que me llevaría de vuelta a tus brazos. 
          Mi pusilanimidad lo impediría. 
          Si estuvieras acá sería diferente me repetí. Hubieras prestado oido a mis desgracias hasta ver lucero del alba asomarse en tanto tu esencia arrullaba la mia.
          Aún lo sigo intentando.
          Sería capaz de resistir otra despedida? No podría soportarlo 
          Estarías orgulloso de mi ahora? 
          Fuguémonos en la Ducati, encamínate hacia el mar. 
          Llévame a donde tu estás. 
          Me dirijo a tu encuentro.
          Espérame en el aura, en los astros, en el cosmos. 
          Sideral.

Souhaitex

El acorde de su voz resuena en mi mente. Pretender resistirme es en vano, la melodía de su risa me envuelve: fresca, aguda, punzante.
          Está del otro lado, puedo verla en cada toma. Emana satisfacción mientras le sonríe.
          Luce igual de dichosa que en mi quimera dónde abrió paso entre mis pliegues apoderándose celosa de mi flor, la cual degustaba con devoción antes de arrebatarme mi último suspiro antes del estallido.
          No quemaba, no ardía, no dolía. 
          Fue en un exiguo instante de flaqueza que bajé la guardia: Su sonrisa apacible, sus ojos solo se dirigían hacia mi mientras sus labios repetían mi nombre.
          En qué momento se terminó el vino?
          Aún con resaca se acerca otra copa a los labios es tinto y está amargo.
          Al sorber de mi boca sabe dulce, de ahí lo prefiere.
          El té está tibio, aún así lo soplo. 
          Me da miedo quemarme.
          Estoy al borde del abismo, me tiemblan las piernas. 
          Te aferras con fuerza a su mano, lo que me impide tocar las tuyas.
          Que haces ahí?
          Que buscas sentir?
          Podria(mos) sobrevivir después de esto?.

Souhaitex

Mi psique lo intentó, todos lo intentan. 
          Puedo ver en sus caras la desesperación x mantenerme con vida.
          Entiendo que es egoísta sucumbir de esta manera, de todas formas, no es algo en lo que me detenga a pensar. Sé que si lo hago puedo flaquear, no puedo permitirme titubear.
          Dejó atrás 2 melodías sincopadas que perdurarán en el tiempo. Una tan particularmente extravagante e inesperada, se convierte en una especie de JazzFussion en constante metamorfosis. La otra tan armoniosa y apacible, aunque repentinamente modulable e improvisado tal como el Romanticismo de Chaikovski. 
          Lo sé xq yo las formé.
          Soy el preludio que da paso al estallido.

Souhaitex

No pude volver a reproducir tu canción, seguís escuchando la mía?
          Sigo teniendo el presentimiento de encontrarte del otro lado.. sensación puramente unilateral.
          Ella me tomó de la mano y aún no me suelta, se siente bien.. empero por alguna razón no le permito entrar.
          Estoy estropeada y no logra repararme. 
          No es su culpa.
          Persisto acurrucada en el punto más oscuro de la noche, no obstante ya no aguardo al amanecer.
          Necesito saber..
          Que imagen enseñarás de mi cuando te pregunte quien soy?
          

Souhaitex

Las cartas estaban tiradas y el placer estaba funcionando. Banalmente satisfactorio.
          De repente una explosión, mi mundo se vino abajo y te sentaste a mi lado a ver cómo se caía.
          Debí notarlo en ese momento.
          Fue entonces cuando la brisa se abrió paso entre el Yin y el Yang, el frío de aquella mañana se imponía. Pero no importaba tus sofisticas promesas me envolvían.
          Fui tan efímera en tu vida que no tuve tiempo de quedarme con una parte, yo si que lo di todo y todos lo saben.
          No me importaba desdibujarme, con tal de darte color. Sin embargo, aprovechaste cada oportunidad de impactarme... de derribarme.
          Y aunque sucumbí, casi sin poder respirar, apuntaste y disparaste.
          Pese a que advertí todas las señales, me quedé. 
          Solo cerré los ojos y aún temblando, me lance al precipicio.
          Recuerdo haber soltado su mano para tomar la tuya y no sentí miedo, no hasta el día que dijiste: disfruto lastimarte. Sin dudas lo disfrutabas, pero solo cuando el dolor no era el tuyo.
          Miento si te digo que no me destrozaste, en menos de 2 meses nos reemplazaste.
          ¿Lo decías en serio cuando me lo dijiste primero?
          Nunca fue mi intención terminar de este modo, solo quería que me dejaras entrar, que te dejes cuidar, que te permitas amar.
          A pesar de las muchas razones por las que podría odiarte, elijo no hacerlo. No niego que lo intenté, pero sería traicionar el lugar que alguna vez fue mi refugio cuando afuera solo había tormenta.
          Por eso, Bugaboo, no digas que sencillamente desistí. No te culpo, fue idea mía resistir. 
          Morí un poco, si.. pero algún día recontruiré la vida que te llevaste.