Soy agradecido con esas personas.
Pero al parecer en esté reino nadie podría
permitirse la molestia en tan siquiera
reconocer ó agradecer mis esfuerzos.
Tampoco soy un monstruo, Ginnie...
es como si fuéramos extraños, no me
conoces realmente. Oh por favor, son
excusas, cuando y plebeyo rompa tu
frágil corazón por fin te darás
cuenta de que, no sirve para nada ser
bueno.