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Bah, seguro ellos mismos hablan mal de sí mismos. Deben estar al tanto de lo horribles que son. Me avisa cuándo pueda que tengo todo listo para hacerlo, ¿tendré un castigo si comienzo por las chicas? Sabe que sé cómo entrar a su lugar. Se quedarían perdidos sin ti, literalmente. Apenas saben tener una charla con uno de nosotros sin soltar algún insulto. ¡Y le hicieron una broma ya! No es que haya sido pésima, pero parecía broma de principiante. Esperaba algo peor. No se lo merece, claro. ¡Nos quitó hasta la guardia por una semana! ¿Qué pasa con los que no hicimos nada? Aquí no aplica el si cae uno, caen todos. Entonces, ¿mi cita? Ya sabe, esas que siempre hace para hablar y todas esas mierdas sentimentales. No es que quiera, pero me aburrí en la habitación. Ahí le saco chisme. 

Intentaré ir cuanto antes, de ser así, ¿dices que no importa si es tarde? Señorita Bourtbell, cuidado con sus palabras porque las puedo usar en su contra si aparezco a las dos de la mañana por allá. ¿Se ha hartado de mí también? Prefiero la mentira que la realidad, así que mejor solo diga que no, porque herirá mi corazón escuchar lo contrario. Ahora podría usted comenzar a ir recordando esa faceta, porque no desaparecerá más. Hablando de nuevas, ¿hay nuevas este año? Me intriga eso. No soy un don Juan, para nada, solo un amante de la gente bella. Los directivos de este lugar hacen tremendamente mal en llenarte de problemas, mira si te les escapas, ya los veo quejándose y lamentándose por haber perdido a la mejor consejera.

Buenas tardes a todos los que considero mis favoritos.

Señorita, Bourtbell, miré nada más esa belleza
          que carga en su rostro, ¿Es soltera o tiene un
          compromiso? Estoy libre el fin de semana para
          charla de mis relaciones intrafamiliares. En fin. Bienvenida sea nuevamente.

Tal vez, entre internados, no estemos de acuerdo en millones de cosas, pero podríamos hacer tregua al decir que es la mejor consejera que existe, ¿usted qué cree? Y sea más que bienvenida.

Ya puedo hacer descansar mi corazón que con tanta preocupación esperaba su llegada, señorita Boutbell. ¿Ya le han dicho que es la consejera más guapa de todo el internado? Debería saberlo. Bienvenida sea, ya hacía falta por aquí.

¡Está bien! Lo lamento, Lennon, pero no me regañes, sabes que soy un alma sensible. ¿Qué tal estuvieron tus vacaciones? ¿Pudiste descansar de las presiones de mi mamá y mi tío? Espero que si, aunque seguramente tenernos contigo recompensa todo. 

Te quería molestar, Lennon. ¿Funcionó? No me parece justo que siempre estés igual de seria. Muéstrame una sonrisa, a ver. Luces joven, ¿qué tonterías dices? Comparado a los demás viejos, podrías ser una adolescente de recién dieciséis años. Todos son unos pesados, no es secreto, pero me lo guardaré. ¿Tuvo buenas vacaciones, señorita Bourtbell?

¡Lennon, bonita! Me alegra verte. Lamento ser tan confianzuda, es que suelo sentirme cómoda contigo. Y otra vez lo estoy haciendo… lo siento señorita. ¿Cómo le fue en su verano? Espero que genial por supuesto.

Bienvenida sea señorita Bourtbell.