SoyOIiviaCooke

Es… No sé cómo decírtelo sin ponerme roja, pero llevo tiempo… ¿Recuerdas cuando fui a tu casa con chocolate y cervezas? Ese día no podía dejar de pensar en lo bien que te verías y en lo ansiosa que me pondría escucharte hablar o siquiera que me toques amistosamente. Pensar en ti me generaba un revuelo de emociones y eso no cambió desde ese día porque, de hecho, se agravó. Todo lo que sentía por ti en un principio se expandió, Matt, porque has logrado ocupar todo pensamiento y cada suspiro mío. Cuando estoy en el mercado, cuando ensayo las líneas, cuando hago deporte. Te adentras en mi mente en todo momento porque me gustas, y pensarte se convirtió en mi pasatiempo favorito estos últimos meses.
          
          Me gusta ver tu ilusión cuando me explicas sobre futbol aun sabiendo que no entiendo nada, las expresiones que pones cuando comes tu comida favorita o lo detallista que eres. De hecho, me gusta todo eso. También tu boca, tus ojos, tus manos, tu voz. Dios, me gustas mucho. Me gustas por todo lo que eres y todo lo que conozco de ti, Matthew. No hay día que no pase pensando en cómo haces que mi corazón lata de felicidad cuando me miras en el set o cuando intercambiamos palabras en entrevistas. Yo– Me gustas. Mucho. Demasiado. Sólo eso.

SoyOIiviaCooke

Llevo fácil diez minutos leyéndote y sin parar de sonreír de felicidad por tus palabras. Te amo, ¿sabías eso? Y me gustas con todo mi corazón, Robb. Con todo lo que soy. 
            
            Jamás he dicho algo sobre no confiar en ti. Por favor, no creas que mis bromas reflejan falta de confianza en ti, porque no es así. Pero tengo miedo, así como seguramente lo tienes tú, porque no quisiera perderte por algo tonto. Pero, si me dejas, quizás podríamos convertirnos en algo más con el tiempo y aprender de nuestros errores juntos. Quizás hasta podríamos vivir juntos con Bobby y ver los partidos con cerveza. Sé que, si nos diéramos una oportunidad, no nos lastimaríamos; yo jamás te defraudaría como otras personas han hecho en lo que respecta el amor, Matt. Te amo muchísimo como para dañarte.
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