Hades estaba enamorado de Artemisa, la diosa más linda de la tierra actual, una mujer cuya belleza no podía ser igualada, desde cierto día Hades se enamoró de tan maravillosa y bondadosa mujer siendo él todo lo contrarió. Él estaba consciente de ese sentimiento que lo torturaba noche tras noche y de lo grandioso que se sentía su corazón al recordarla, era un sentimiento culposo que lo hacía sentir egoísta y estúpido al mismo tiempo, quería sacarse ese sentimiento de la cabeza a como diera lugar, para él ella era una hermosa flor de loto, de la cual admira su belleza y que amaba observar a la lejanía, pero si se le acercaba su nerviosismo lo hacía caerse por un abismo, él sentía que le debía algo, y sentía que no quería alejarse porque la amaba, y la amaría hasta el final de sus días.