》Hoy, 20 de diciembre en Japón, celebramos los 27 años de Suzuka Nakamoto, una artista que, junto al Team Babymetal, revolucionó la música y demostró lo que significa ser auténtica en un mundo lleno de falsedades.
Hablar de Su-Metal es hablar de talento y de cómo usarlo para marcar la diferencia. No exagero al decir que ella me inspiró a seguir adelante y levantarme en momentos difíciles. Amar a alguien es reconocer lo que realmente es y lo que aporta. Objetivamente, Su es de las mejores artistas de su generación, si no la mejor.
Enfrentó desafíos que pocos podrían manejar con su madurez y fuerza. Imaginen: Sonisphere 2014, 16 años, un tutú, una coleta, cantando en un idioma incomprensible para el 99,9 % de los 50 mil metaleros presentes, quienes esperaban a Iron Maiden. No solo cantó: convirtió una audiencia hostil en suya, pasando de la incredulidad al grito unánime de “¡Queremos más!”. Eso es ser metal.
Ha enfrentado críticas, sobre todo de los llamados "trve", quienes afirman que "no es metal". Pero, ¿qué hay más metal que demostrar, como lo hizo en Sonisphere, que nada puede detenerte? El metal no es un atuendo ni un sonido, es actitud. Y Su la tiene. Cuando se lo propone, nada ni nadie puede detenerla.
Por su fidelidad a su estilo, su talento, trabajo duro, humildad y profesionalismo, Su es amada como artista y persona. Su voz, presencia escénica y dedicación la hacen un modelo a seguir para millones. Su impacto no se mide solo en ventas o giras, sino en cómo cambió la percepción del metal y tocó los corazones de quienes la escuchan.
Feliz cumpleaños, Suzuka Nakamoto. Gracias por recordarnos que el verdadero poder está en ser auténticos y no dejar que otros definan quién debemos ser. ¡Qué privilegio vivir en la era de Su-Metal, carajo!
