Me gusta pensar que soy las olas en un mar de dudas, donde cada jodida marea trae consigo sentimientos que rompen almas, y que a veces, solo a veces, las curan.
Me gusta pensar que soy las olas en un mar de dudas, donde cada jodida marea trae consigo sentimientos que rompen almas, y que a veces, solo a veces, las curan.
Por mucho que me esfuerze en que no pase algo, llegará. La muerte no discrimina, arrasa con todos, sin importar nada, escoje sin juzgar, a los más indefensos, en su peor momento.
Siento que estoy a punto de explotar por una impotencia que hasta ahora no sabía que se hallaba en mi interior, custodiada por mi miedo a aceptarla como una parte más de mí.