Puedo escuchar sus alegres cánticos a lo lejos,para ser exacta,en el vestíbulo de una primaria. Mientras tanto,yo,sentada en una esquina de un patio de una primaria ajena escribo.mientras escucho la tonada navideña de algún adorno musical actual,junto con ello,la brisa mueve el papel china a los extremos de mas de seis piñatas colgadas.Alguien podría pensar que me siento mal,pero no es así,pues así amo estar,en silencio, escuchando las voces de gente alegre cerca pero lo suficientemente lejos para escuchar los ruidos de el ambiente que me envuelve.