Sé que no soy la única persona que sufre y odia, pero juro que odio con toda mi alma a mi papá, no lo soporto y a veces ni siquiera quiero hablarle. Me jode que tenga el descaro de hablarme con tanta normalidad cuando él hace sus cagadas siempre a espaldas de sus hijos, prefirió mantener al hijo de otra mujer y nunca nos puso como su prioridad, lo odio porque cuando más lo necesitaba solo obtenía el amor y cariño de mi cuñado cuando lo que más quería era el abrazo de mi papá, ese que solo llegaba de noche para pelear con mi mamá porque otra vez la había engañado, el que se volvió un extraño mientras crecía porque no quería pasar tiempo con ninguno de sus hijos, ese que siempre llamaba a unos niños idiotas o estúpidos para cualquier cosa. Pero lo que más odio es que yo solita me cree una historia en donde mi papá me quería, no me insultaba y jugaba conmigo tal cual los papás de mis amigas en la primaria o secundaria.