te extrañé mucho, no puedo explicar la tanta falta que me hiciste, en serio fue tan triste pasar mis días sin no saber nada de tí, me puse tan triste porque no podia hablar contigo...
bien, mi amor, entonces vamos a la cama — sus manos descendieron hasta los muslos impropios los cuales fueron tomados con delicadeza para levantarla e indicarle que envolviera sus piernas en su torso.