“Si no te quieren como mereces, ¿no será que mereces algo mejor?”
Lo mejor es quererte, valorarte y recordar que tu felicidad no puede depender de factores externos. Mientras no encuentres la paz y puedas llevarte bien contigo mismo, será imposible llevarte bien con alguien más. ¿No te aman como mereces? ¿No te valoran ni apoyan tu crecimiento personal, profesional o espiritual?, analiza qué has hecho o dejado de hacer para atraer a ese tipo de especímenes a tu vida. Te recuerdo que en el amor, gran parte de lo que sucede, lo provocas o lo permites .