▔▔▔▔▔▔▔ “Para eso son las citas, duh” respondió la fantasma, en un tono ácido de sarcasmo. “Si no tienes un momento completamente a solas con esa persona, va a ser imposible que la relación avance” se explicó, al darse cuenta de las palabras que usó, sintió un escalofrío
“Demonios, estoy soñando cómo Masami” y acto seguido, sacó un extraño perfume de quién sabe dónde y comenzó a rociarse alrededor con ganas, antes de guardarlo.