Querido amor, me has hecho confundir tantas veces, te me has prestado la vida entera de formas distintas, en diferentes empaques, en diferentes versiones, en diferentes intensidades; te haz presentado entrelazando pensamientos, acciones, emociones fuertes y débiles y confundiendo demás sentimientos. Y aunque en ocasiones dueles, no te culpo por traer sonrisas, personas, corazones, mentes y aflicciones a mi, más bien te doy las gracias, por ti he conocido personas maravillosas, de corazones tan grandes como el infinito mismo, por ti he conocido lo bello que es vivir, así sea por un instante.