Y lo peor fue pensar que no dolería tanto, que era lo correcto para los dos, uña por uña, diente por diente, como un puto karma. Sólo la idea de que ya no sientas lo mismo que antes duele, de que ya no lo des todo por mí, que seas tan frío conmigo. Y es verdad que somos polos opuestos, pero siempre se ha dicho que estos se atraen no? Pues déjame volver a ti, a enamorarte por segunda vez, y demostrarte que me necesitas tanto como yo a ti.