Ahora un poema después de casi morir ocho veces
Día eterno, frío invierno dame el aliento que me hace falta para seguir
Noche oscura, sin penumbra dame la fuerza que necesito para seguir en el naufragio
Dulce vida deja de perseguirme, y solo quita el aliento con un simple movimiento
Cariño sincero tan directo dame las últimas caricias para irme sin remordimiento
Algún día de estos actualizaré solo es un poco de lo que pienso sin nada más que decir
quesito se va * c pone a llorar*