Entré aquí para leer mis borradores sobre aquellas ideas locas que dejé abandonadas. Me encuentro un poco melancólica por recordar aquella chica tan entusiasta, con una imaginación inquebrantable y una sonrisa abracadabrante que, para su desgracia, le fue arrebata de forma inhumana.
Con el corazón en la mano y mis lágrimas acompañándome en mi añoranza, me he decidido volver a escribir. Quiero sentirme viva de alguna manera, quiero gritar lo que siento y lo que callo... Necesito volver a encontrarme porque me he perdido en todos los sentidos.
Estos últimos años fueron muy difíciles, pues fui diagnosticada con TLP. Creí que sabiendo lo que me atormentaba día y noche me haría sentir mejor y podría comprenderme a mí misma. Errar en mis propios pensamientos y criterios fue como una bofetada de la vida, exclamando con fuerza lo mucho que desprecia mi ser. Y es entonces donde me cuestiono: ¿Cuándo dejó de cobrar sentido mi vida? ¿Desde cuándo me siento como un barco en la deriva?
Estoy remando sola y siento que en cualquier momento voy detenerme para poder descansar, aunque eso conlleve a que mi barca se hunda en lo más profundo del océano.