Capitulo II [No era parte del plan]

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Las semanas pasaban lentamente. Greece era una chica que sacaba buenas notas, pero la llegada de Santiago hacia que su cabeza no estubiera totalmente concentrada. >>Esto no era parte del plan.- se decía  Greece, al percatarse que pensaba en aquel chico.  

Por otra parte Santiago se había enamorado de Greece; nunca vio a otro ser que le pareciera perfecto. Greese tenía la mirada muy fría, pero a Santiago le causaba una sensación que no se explicaba y que jamás había experimentado. 

Estaban en clase de literatura y Greece estaba escribiendo unas cuantas cosas en su libreta, cuando sintió la mirada de Santiago, su corazón dio un vuelco cuando sus miradas chocaron; él le hacian sentirse de una manera distinta. Pasaron 2 minutos antes de darse cuenta que Greece lo miraba como a nadie había visto jamás.

Cuando se dio cuanta, todos sus compañeros los veían y les hacían burla de que ambos se estaban enamorando. Greece no se permitiría eso, de ninguna manera puede enamorarse de alguien y menos de Santiago. A él le encantaba mirarla a lo lejos, con la mirada siempre fría y vacia, algo que Santiago no entendía el porqué de eso, pero le encantaría saber más de ella. 

-Te esta viendo.- dijo August con tono de burla. - te mira ya desde hace un rato atrás, ve y hazle la platica. 

-¡¿Estás loco?!.- dijo un poco exaltada.- no haré eso...aún. Deja que pase un tiempo más y se vuelva loco por mi.

-Eres toda una loca, por eso no tienes amigos.

-Oh, cállate, que tú eres el único amigo que tengo y tú estas conmigo en esto, ¿recuerdas?

August se quedó callado durante un tiempo antes de abrir la boca, pero la cerró ya que no sabía como contestar a eso. 

-¿Greece?.- preguntó un poco tímido.

-Dime.- respondió aún escribiendo en su libreta.

-¿Por qué hacemos esto?

-Porque lo prometimos, ¿ya lo olvidaste?.- dijo, esta vez levantando la vista hacia su amigo.

-No, no lo olvidaré, pero ¿por qué? ¿tan desesperados estabamos? Digo, esto es una mierda, no podemos seguir haciendolo.

-Tenemos qué, no hay otra alternativa o a menos de que quieras m...- justo en el momento de la plática el profesor les llamó.

-¿Qué es más interesante que mi clase, señorita Sanderson y joven Brooks?.- dijo el profesor con el seño fruncido.

-Nada señor.-  dijeron en coro, agachando la cabeza.

-Que no su repita jóvenes.-  el profesor se dio media vuelta y siguió dando su clase.

Después de media hora, la clase terminó y ninguno de los dos quería seguir con el tema. 

Santiago estaba a dos metros de distancia de Greece y aun que ella se percataba de todos sus movimientos no lo miraba, no quería que el sentimiento creciera. 

Llegó la hora del almuerzo y como siempre Greece y August se sentaron en la mesa más alejada, no les gustaba que los demás escucharan su conversación. Cualquier persona normal se daría cuenta de que no es una plática de jóvenes normales. Sin embargo, Santiago no sabía en lo que se metía, y fue en dirección de ellos. 

-¿Puedo sentarme?.- dijo con las mejillas un poco sonrojadas y una leve sonrisa. 

August y Greece se miraron con complicidad.- ¡Claro!.- mencionó August con una gran sonrisa mostrando sus dientes grandes y blancos, abrazandolo por los hombros. 

Santiago y Greece se miraron por un breve momento, no más de dos segundos. Greece fue la primera en apartar la mirada. 

-Y bien, dinos, ¿qué te trajo a este lugar tan frío y escalofriante?.- Fue Greece quien rompió el silencio. Se ganó la mirada de ambos chicos quienes se encontraban comiendo sus almuerzos y platicando.

-Secuestraron a mi padre.- dijo con cierta tristeza en sus ojos.- realmente no sé quienes hayan sido, pero ojalá que se pudran en la carcel una vez que los agarren. 

-¿En qué tabajaba tu papá?.- preguntaron con descaro en su voz.

-Estaba en la marina.

Los tres chicos quedaron en un silecio metidos en sus pensamientos. Pero los pensamientos de Greece no eran buenos. August sabía que estaba tramando algo; no le sorprendió. 

The world of GreeceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora