nueve

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Terminó el descanso de Santa Claus, debía volver a montar su trineo y dejar obsequios para todo los niños del mundo, al igual que dejar a JungKook y JiMin en su hogar.

TaeHyung y YoonGi quisieron acompañarlos, más que nada Tae, por qué se sentía triste por creer que no volvería a ver a Kookie.

—¿Estan listos? Ya vamos a salir. —Avisó la bola roja, digo, Santa Claus.

Cada uno de los menores se la pasó divirtiendose en lo que quedaba de viaje.

En un momento Kook volteó hacía su mejor amigo, viendo como éste era abrazado por YoonGi, quien depositaba cálidos besos sobre su rubia cabellera.

Tae igual notó eso, jaló del brazo a JungKook atrayendolo a su pecho, se recostó y comenzó a jugar con sus cachetes.

—Kookie, eres muy lindo, te extrañare.

—TaeTae, yo también.

Concluyeron sus declaraciones con un abrazo.

Llegaron a su destinos, todos bajaron del trineo siendo sumamente silenciosos.

—No te quiero dejar ir... —Susurró Kookie sintiendo las lágrimas aproximarse.

—Siempre estaré contigo Kookie, solo promete que no me olvidarás.

—Lo prometo. —El azabache levantó su puño con su meñique alzado para así cellar la promesa.

Pero TaeHyung simplemente tomó sus mejillas y dejó un tierno beso en los labios de JungKook, quien ya estaba hecho un tomatito.

—Lo siento mucho niños, es hora de perder estas horas que pasaron juntos.

santa | taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora