El Viaje (El Lago 3)

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Esteban: ¡No!

Tenía que llegar ella en este preciso momento, me pare y me fui corriendo al agua junto a mis primos.

Esteban: llegó Paola y lo arruinó todo.

Juan: ¿llegó Paola? (asustado)

Nunca había visto la cara de alguien tan asustado, pero mi primo parecía tenerle mucho miedo a mi papá y a mi niñera.

Paola: ¡niños, salgan del agua vengan a comer!

Nadie quería salir del agua con Paola esperándonos, quien sabe que nos podría hacer así que nos quedamos por un buen rato allí dentro hasta que papá nos sacó uno por uno.

Richard: ¿no era tan difícil salir del agua, no lo creen? Y que fue eso Esteban, dejaste a Laura sola con tu madre.

Esteban: todo fue por culpa de Paola

Paola: ¿yo qué?

Esteban: si ella no fuera tan inoportuna...

Richard: no es excusa, ve y discúlpate con ella, no ha parado de llorar.

Paola: bien hecho galán

No pensé que al haber salido corriendo Laura se pondría así,
Camine hasta donde se encontraba Laura para pedirle disculpas y no me atreví a acercarme.

Laura: Esteban, siéntate a mi lado ¿quieres?

No me quedó de otra que sentarme a su lado y esperar a que me gritara o algo como siempre lo hace.

Laura: ¿por qué saliste corriendo cuando llegó Paola?

Esteban: es difícil explicar lo que pasó y no sé si te va a agradar lo que te diré

Laura: Esteban ¿hace cuando hace ya que somos amigos?

Esteban: no lo sé, desde pequeños.

Laura: ¿entonces? Tú sabes que puedes contarme todo

Esteban: bueno, no quiero que te pongas a reír o me dejes aquí como si fuese un pedazo de papel.

Laura: nunca, vamos que quiero escuchar todo lo que tengas que decir.

Esteban: antes de que mis padres llegasen a casa, un día encontré a Paola usando pañales, con un chupón en la boca y una biberón a su lado.

Laura: ¿espera, encontraste a Paola como un bebé?

Esteban: pues si me quedé dormido a su lado.

Laura: yo pensé que te irías y la dejarías sola.

Esteban: la cosa es que, al despertar, Paola estaba entre furiosa y asustada.

Laura: era obvio, descubriste su más grande secreto y te quedaste a su lado.

Esteban: la verdad es que no sé por qué lo hice.

Laura: ¿y que pasó al día siguiente?

Esteban: me levante y le prepare un biberón con leche caliente.

Laura: ¿y no te incomodó ser su niñera por un momento?

Esteban: la verdad es que no, y cuando me recibió el biberón me sonrió, después de eso me fui a bañar.

Laura: ¿Ufff, y es por eso por lo que corres cuando está cerca tuyo?

Esteban: no, lo que pasó después es lo peor.

Laura: ¿el hecho de haber encontrado a Paola como un bebé no fue lo peor?

Esteban: no, desde ese entonces Paola andaba en pañales todo el día cuando estábamos solos en casa, hasta que un día llegó una señora y...

Laura: ¿espera, andaba como un bebé todo el día frente tuyo?

Esteban: así es, cuando llego la señora me agarro de un brazo, me llevó a mi habitación y comenzó a sacar cosas de un bolso.

Laura: ¿eran cosas de bebé?

Esteban: exactamente y me vistió igual que un bebé.

Laura: noooo, pero te resististe en un momento.

Esteban: la verdad es que no y no me dejan usar el baño desde ese día.

Así le seguí contando todo hasta lo que sucede hoy con mis primos, Paola y yo.

Mi niñera y Yo (bebé A Los 12)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora