Contención y Realización

Parte 6

El resto de su calor no es tan malo y pasa bastante rápido.

Sin embargo, no hay señales de Lan Wangji, lo que preocupa a Wei Wuxian.

Pregunta por él cuando finalmente es capaz de dejar el Jingshi.

"Oh, está atravesando su rutina en una de las casas separadas. Debería terminar pronto", explica Lan Xichen. Wei Wuxian se congela, atrapado entre la pena y la ira.

Lan Wangji entró en una rutina, probablemente provocada por el calor de Wei Wuxian. Normalmente se consideraría una bendición para una pareja ser tan compatibles que sus ciclos se hayan sincronizado tan rápidamente. Pero Lan Wangji está atravesando su rutina solo, como lo hizo Wei Wuxian.

"¿Estás bien?" Lan Xichen pregunta, preocupado. Estás muy pálido. Tu cuerpo puede estar un poco débil después de tu calor, mi compañero siempre... uhm, quiero decir, deberías tomártelo con calma".

Sus palabras apenas se registran en la mente de Wei Wuxian. Son como abejas zumbando en el fondo de sus pensamientos infelices.

"Sí", exhala. "Creo que voy a dar un paseo".

Lan Xichen dice algo, pero Wei Wuxian no lo capta. Se mueve como un sonámbulo. Termina sentado junto al río, revolcándose en el hecho de que su compañero lo odia tanto que no lo tocará ni siquiera en celo.

Cuando se reencuentran, es extraño. Lan Wangji se ve cansado y delgado, pero todavía es tan hermoso que la respiración de Wei Wuxian se entrecorta.

No quiere estar cerca de él más de lo necesario, sintiéndose todavía herido. Su marido tiene un plan diferente.

"Wei Ying". Lo alcanza en una de las muchas caminatas de Wei Wuxian.

Wei Wuxian se detiene, pero no se da vuelta. Su corazón late incómodamente rápido y su estómago se revuelve. Puede sentir a Lan Wangji parado cerca de él, tan cerca que una ráfaga de viento hace que su túnica roce la de Wei Wuxian.

"Quería ver si estabas bien", dice. Su voz es tan baja y profunda que hace que Wei Wuxian se estremezca, recordándole los poderosos acordes que Lan Wangji puede tocar en su guqin.

"Estoy bien." Ni siquiera intenta ocultar la descarada mentira.

Lan Wangji lo agarra del hombro, gentil pero firme, y lo hace girar para mirarlo.

Wei Wuxian mantiene la cabeza baja, sin mirar a los ojos a Lan Wangji.

"De verdad, lo estoy..." se aleja mientras sus ojos se dirigen a la mano de Lan Wangji que aún está en su hombro y ve las crestas sangrientas de sus muñecas. "¿Qué es esto?" pregunta, horrorizado.

Lan Wangji intenta apartar su mano, pero Wei Wuxian es más rápido. Toma la mano de Lan Wangji y empuja la manga larga hacia atrás para ver el daño en su piel.

"No es nada", suspira Lan Wangji. Su mano tiembla un poco bajo el toque de Wei Wuxian.

Wei Wuxian toma su otra mano y esta vez Lan Wangji no opuso resistencia. Su muñeca izquierda está tan herida como la derecha.

Wei Wuxian levanta la vista y se encuentra con los ojos del alfa por primera vez. La ira protectora que siente debe ser visible en su mirada aguda, porque los ojos de Lan Wangji se abren con sorpresa.

"¡No es nada! Estás herido. Lan Zhan, cuéntame qué pasó", insiste.

El alfa parece casi avergonzado, es su turno de evitar el contacto visual.

"Estaba en celo", comienza.

"Lo sé", murmura Wei Wuxian, todavía sintiéndose amargado por ello.