CAPITULO 3

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Todos en el lugar miraban a la criatura de cola morada con asombro mientras que un muy avergonzado Xichen escondía su rostro entre sus manos, en realidad no se sentía arrepentido de lo que acababa de hacer, pero aun así se sentía reamente avergonzado.

-lo lamento – fue lo único que salió de su boca en ese momento – lo lamentarás aún más cuando Jiang Cheng tenga de vuelta sus fuerzas – respondía muy molesto el joven Wei.

Flashback

-¡¿Qué le hiciste?! – preguntó muy alertado el joven príncipe Wei – tranquilo, esto es un sedante especial sabes?, nos ayudará a mantener quieto a tu hermano – respondió con tranquilidad Xichen

-Wei Wuxian o Wei Ying – dijo con seriedad – Mmm? – preguntó Wangji algo confundido – esos son muy nombres – respondió mirando al joven Lan delante suyo

-(Wei Ying... que bello nombre) – pensó Wangji – verdad que si? A mí también me encanta – dijo el joven Wei esta vez con una sonrisa - ¿Cómo...? – preguntó el joven Lan aún más confundido y sorprendido que antes a lo que recibió como respuesta – tenemos el poder de leer mentes humanas –

Mientras ambos chicos antes mencionados charlaban, por su parte Xichen revisaba los cortes que tenía el joven Jiang. Iba midiendo la profundidad de cada uno para luego limpiarlos y vendarlos, hasta que se topó con una que a simple vista no se notaba, pero ante los ojos del Lan imposible de no notar. Pasó con delicadeza uno de sus dedos por aquella ligera abertura, la cual se abrió un poco más, Xichen volvió a pasar su dedo por esa zona y entonces ...

-Ah! ~ - un suave gemido salió de la boca de Wanyin, pues este no estaba inconsciente, solo algo adormilado

Todos inmediatamente voltearon a ver a Xichen con curiosidad a excepción del joven Wei quien estaba modesto

- ¡¿Por qué demonios tocaste sus genitales?! – preguntó furioso al mayor de los Lan

- ¡¿genitales?! – preguntó muy sorprendido Xichen para luego cubrirse su rostro con las manos

Fin del flashback

Media hora después el joven príncipe Jiang volvió a la normalidad notando como las miradas de todos se centraban en el

-¿Por qué todos me miran así? – preguntó con incomodidad y molestia el joven Jiang

Todos por inercia señalaron a Wei Wuxian

-yo no fui, a mí no me vengan con cuentos – dijo en su defensa en joven Wei

-ahora que me hiciste? – dijo el joven Jiang al principal sospechoso (según él) a lo que este se quedó en silencio

- ¿qué me hizo? – preguntó esta vez mirando a Huaisang a lo que este respondió – no lo sé, en verdad no lo sé-

-sea lo que sea que me hayas hecho, te romperé la aleta – dijo amenazante al joven Wei

-solo les dije tu nombre – dijo como si nada - ¡TÚ! – dijo con ira el príncipe Jiang para luego arrojar a su hermano al agua y luego él se sumergió

-¿deberíamos entrar para evitar que se hagan daño? – preguntó Xichen a Huaisang

- no, ellos siempre pelean y nunca se han llegado a hacer mucho daño – respondió Huaisang mirando el agua – ustedes también necesitan comer – dijo Huaisang para después dirigirse a la salida – síganme –

Mientras tanto en el reino de Yunmeng

Desde la desaparición de los príncipes todo el reino se había vuelto un caos. Todos en el reino buscaban sin cesar a los príncipes sin éxito alguno pero lo peor sucedía en el castillo.

-señor ya le dije que no puede entrar, en la sala del trono solo pueden entrar la familia real y los guardias de la corte – dijo uno de los guardias que cuidaba la sala del trono con temor, pero firmeza en sus palabras

-no por mucho – respondió la mujer que estaba a lado del hombre que amenazaba al guardia – ustedes saben que, si esos dos no aparecen en 3 meses, ese palacio y este reino le pertenecerán al joven amo Wen – continuó la mujer aferrándose con vulgaridad al cuerpo del hombre antes mencionado

-ya lo oíste – replicó el hombre con un tono arrogante

-señor Wen Chao, le suplico que entienda ¡este lugar no le pertenece y no le pertenecerá jamás! – dijo esto último con un grito, aunque sabía que podría morir ahí mismo nunca dejaría de lado su lealtad a ese reino

-morirás – dijo el guardia que acompañaba a la pareja Wen mientras creaba una esfera de energía en su mano derecha. El guardia sabía que no tenía oportunidad contra aquel guerrero así que solamente se preparó para su muerte en ese momento

-déjalo Wen Zhuliu, ya no importa – ordenó Wen Chao – pero señor... el... - intento responder, pero fue rápidamente interrumpido – ¡¿cómo te atreves a ignorar mis órdenes Wen Zhuliu?! – interrumpió Wen Chao una chispa de ira en sus ojos – lo lamento mi señor – Wen Zhuliu solo se disculpó con su amo con cierto temor

-volveremos pronto y espero... no exijo que para ese entonces nos dejen entrar de lo contrario... - los guardias presentes se estremecieron en ese momento - ... las consecuencias serán terribles – dijo finalmente Wen Chao para después lanzar tinta y marcharse.

-que espeluznante – suspiró aliviado aquel guardia – ni que lo digas, yo le tengo fobia a los pulpos y de solo ver a esos tipos me dan escalofríos – dijo otro guardia

- ¿crees que el rey y la reina estén bien? – preguntó el segundo guardia a lo que el primero respondió – no lo sé, el mundo humano es muy peligroso para nosotros y si logran ser descubiertos todo se perdió – dijo con melancolía el primer guardia – además la señorita Wen Qing dijo que solo tienen una semana para volver a su forma original-

Con el rey y la reina lejos y recibiendo las amenazas de Wen Chao todo el reino corre peligro, prácticamente en ese momento están contra la espada y la pared.

El reino debe dejar de llorar por la muerte de su muy amada princesa e ir a buscar a los príncipes ya que ellos son la última esperanza, no queda mucho tiempo para que el ejército de los Wen invada el reino y destruya la armonía

Solo les queda esperar....

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se que es un poco tarde pero aún así ¡Felices fiestas! 🎉🎁

Disculpen por el capitulo corto y por la demora 

últimamente no tengo inspiración y estoy muy ocupada debido a mi nuevo trabajo

muchas gracias por leer, votar y comentar 

cuídense mucho ❤❤❤

EL CANTO DE UNA SIRENADonde viven las historias. Descúbrelo ahora