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—【Oh Russ, adoro cuando me dominas hasta en los besos~】—Dijo el extasiado estadounidense luego de haber recibido un beso de aquel atractivo y joven ruso que estaba posicionado arriba suyo.
—【Entonces, ven aquí que voy a hacerte completamente mío~】—Le respondió en su idioma natal con un tono grave y seductor, cerca de la boca del de cincuenta estrellas, para finalmente besarlo una vez más.
Rusia comenzaba por tocar el pecho del contrario sobre su camisa; con calma y sin apuro, al ritmo que lo besaba, disfrutando bien cada momento y sabor hasta llegar a su abdomen, donde se separó del americano debido a la falta de aire, dejando a ambos entre jadeos.
Las curiosas, pero experimentadas manos del de ushanka levantaban la prenda superior del mayor, tocando su, ahora desnudo abdomen con más libertad, mientras se encargaba de hacer movimientos circulares con su pelvis sobre la entrepierna del de lentes, buscando despertar cierta parte del mayor.
Por su lado, el país más longevo deleitaba sus ojos con el cuerpo del que estaba sobre él, sintiendo como su temperatura corporal aumentaba y su erección era cada vez más difícil de disimular.
Las manos del de tez blanca subían por el torso del de ushanka, levantando un poco su suéter de color crema, dejando a la vista por unos pequeños momentos un poco de su abdomen marcado, pero luego decidió descender y hacer un pequeño recorrido que iba desde las caderas hasta los muslos del más alto.
Notó como el ruso paraba sus movimientos ahí abajo; probablemente su erección ya se notaba demasiado. El euroasiático comenzaba a desabotonar su pantalón lentamente mientras se acercaba nuevamente a la cara del norteamericano, depositando un cariñoso beso en su mejilla para después estirarse y alcanzar el cajón de la mesita de luz, agarrando así un pequeño pote de lubricante. Una pequeña herramienta sorpresa que los ayudará ahora... y más tarde por supuesto.
Rusia dejó al descubierto la erección del de menor altura por unos momentos, para después colocarse un poco de lubricante en la palma de su mano, siendo consciente de la mirada lujuriosa que le daba su mayor mientras lo hacía.
Sujetó suavemente la sensible virilidad de su contrario y empezó a esparcir el lubricante que tenía su mano por toda la zona, deteniéndose a ver los gestos del mayor por unos momentos.
Rusia se había acercado otra vez al rostro ajeno, poniendo su mano a un lado del contrario para sostenerse. Le gustaba sentir como la respiración del mayor se volvía cada vez más irregular; y de paso, lograba repartir algún que otro besito en la mejilla o en la frente del de cincuenta estrellas.
USA realmente no entendía como Rusia podía darle su toque de ternura a todo. Pero de algo que sí estaba seguro era que esa característica del muchacho le encantaba.
El ruso siguió con lo suyo mientras mimaba al estadounidense. Su mano logró satisfacer a la perfección las necesidades del mayor; tanto así que terminó por hacer que se corra antes de lo esperado.
—【¿Estás cansado?】—
—【Eres terriblemente malo para los chistes ¿Uh?】—Le respondió divertido. Estaba claro que anhelaba un segundo round.—【Aún te toca a tí.】—Eso causó que el menor trague saliva de manera un tanto nerviosa. Estaba casi asegurado que el dominador sería el dominado.
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▶Ya no sé qué decir, lo que debía informar ya está al principio :')◀
