Los buenos amigos nunca se olvidan, eso solían decir las personas y Maze al igual que Asta lo sabían, querían ayudar a sus amigos Kiato y Kahono, la ocasión perfecta era la fiesta que se daba en honor a los caballeros mágicos.
Maze había partido en busca de su hermana, al parecer la relación con ella había mejorado ya que Gissel no paro de regañar a Maze de haber peleado con aquella herida.
"Tan tonta como siempre"
Aquellas palabras no dejaban de salir de los labios de la pequeña Gissel, pero eran unas palabras con tanta verdad que por ello Maze no se quejó. Al llegar al punto de reunión que había acordado con su pequeña hermana decidieron partir.
-Oye ¿el león pequeño va a asistir?- Le preguntó Gissel a Maze.
-Que gran apodo, si hablas de Leopold la respuesta es sí- contestó Maze viendo el camino.
- ¿piensas ir vestida así?- preguntó la menor.
-Andas muy preguntona hoy...vamos dilo de una vez, al grano- dijo Maze parando su andar al igual que su hermana.
-Al parecer no comprendes la situación, todoooo el pueblo irá a verlos, un chico que es tu amigo- hizo una pausa haciendo comillas con las manos- también te verá, ¿acaso no pensaste que te van a criticar por ser...plebeya?- dijo Gissel bajando un poco la cabeza.
Maze solo se puso a pensar en una cosa, si bien quería impresionar a su amigo no quería impresionar a todo el pueblo, después de todo ella también era plebeya; una plebeya que despreciaba a otra clase social.
-no lo necesito...es mejor presentarme como soy una plebeya- contestó Maze sonriendo.
-sí que eres inocente...supongo que por eso te admiro- dijo la pequeña en voz baja pues a pesar de admirar a su hermana mayor no quería perder aquel ego que tenía.
La noche llegó y con ella los festejos, las órdenes habían llegado al reino y todo se veía tan feliz, Asta y Noelle caminaban junto con Kiato y Kahono, Maze al ver a Kahono se acercó para saludar.
-¡Maze debiste ver el puesto de serpientes moradas!- le dijo Asta emocionado.
- que grandioso, hola chicos- dijo Maze ganándose una sonrisa de parte de Kahono y un saludo de parte de Noelle y Kiato.
-Por cierto, los citamos aquí porque Asta quiere decirles algo- dijo Noelle moviendo sus coletas.
-cuando me sanaron los brazos y sanaron a Maze, la reina de las brujas me otorgó un poco de su poder- dijo Asta liberando ese poder el cual sano a aquellos hermanos.
"Reconstruir los sueños de alguien se siente tan bien..." Pensó Maze.
Aquellos hermanos se miraron, Kiato miraba su pierna nueva y Kahono al fin pudo decir algo, la felicidad que aquellos hermanos sintieron era tan grande que empezaron a cantar y bailar, llamando la atención de las personas.
-parece que te diviertes Maze- Escucho Maze a alguien a sus espaldas.
-Leopold, hola, creí que ibas a estar junto con los capitanes- dijo Maze.
-mi hermana es la que va a estar con ellos- ¿había dicho hermana?
-Oye León pequeño, ¿has pensado en que quieres hacer de grande?- se interpuso en la plática la pequeña hermana de Maze.
-¡claro! Quiero ser rey mago, tengo de rival a Asta y a Yuno- dijo emocionado el Vermillon.
-eso es genial, aunque dudo que Yuno te qui...-
-¡te quiera dejar ganar!- dijo Maze interrumpiendo a su hermana, a veces aquella pequeña era algo dura con sus palabras.
-Prometí ser más fuerte y lo cumpliré ¿estarás conmigo para verlo, Maze?- preguntó el Vermillon con una mirada ilusionada, sin embargo, aquella mirada era diferente, Maze al verlo no sabía qué decirle, se puso nerviosa y su piel empezaba a teñirse de un color rojo; había caído en aquel sentimiento que tanto estaba evitando ¿quién no se enamoraría de tal chico?
-¿te encuentras bien, Maze? ¡Lamento haberte dicho eso!- le dijo el Vermillon apenado después de haber pensado en lo que dijo.
-descuida, estoy bien...respondiendo a tu pregunta.. ¡Estaré para ti siempre!- al parecer las palabras pueden generar sentimientos fuertes en las personas, ambos se sintieron felices y nerviosos, después de todo eran unos jóvenes inexpertos en el amor y ninguno quería dar el siguiente paso; tal vez el temor podía ganarle a ambos caballeros mágicos, algo tan insignificante para algunos, pero para ellos es una barrera que impide hablarse bien o tal vez una inseguridad de pensar que el otro dejará de hablarle.
"¿Por qué no se dicen lo que sienten? Soy un año menor que Maze pero desde el reino del diamante puedo ver lo enamorado que está este chico de mi hermana"
Eso era lo que pensaba Gissel al ver a sus mayores hablar de una manera tan cursi.
-¿qué haces aquí?se supone que me esperarías con los demás-
-hu...-
-¡hermana!-
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Lazos de fuego (En Edición)
RandomDespués de perder a su madre, Maze se ve obligada a cuidar de su hermana y por ello decide trabajar duro para algún día llegar a ser la capitana de una orden. Sin embargo, su mayor miedo se haría presente, codearse con la realeza sonaba aterrador. M...