una vida después de la muerte

47 4 2
                                    

El celular ibe-san sonó cuando bajamos del avión al llegar a nuestro destino pude ver perfectamente como su expresión cambio drásticamente me asuste un poco cuando el me vio entre lagrimas pronto aquellas palabras que me daban tanto miedo fueron pronunciadas, Ash lyns había muerto en la biblioteca publica todo mi mundo se había venido abajo todo alrededor comenzaba a dar vueltas y mi cuerpo se había dejado caer al suelo pronto el mayor me atrapo mientras comenzaba a llorar con desesperación eso sucedió aquel día que había regresado a Japón, pronto como llegue regrese a new york me llevaron hasta la morgue donde estaba el culpable de la muerte de Ash y en seguida estaba el con una expresión como si tuviera un lindo sueño su sonrisa era hermosa pero no podía evitar comenzar a llorar nuevamente ese día fue la ultima vez que lo había visto, desde ese día habían pasado 7 años exactamente aunque pareciera que había superado todo eso no lo había pasado en el pasado, no regrese a Japón me había quedado en new york a vivir.

Una de las noches que salía a caminar mire a un chico muy parecido a Ash sin dudarlo había ido corriendo detrás de el pero al llegar y sujetar su hombro no era simplemente era alguien que se parecía completamente, tape mi boca mientras mis lagrimas salían sin poder parar era increíble el parecido pero simplemente no era, el chico simplemente se retiro al igual que yo desde ese día había tenido de nuevo una recaída la depresión era algo que ya no podía soportar, mientras tomaba algunas pastillas que me ayudaba para dormir prendí mi computadora comenzando a ver fotografías y videos que había tomado mientras estuvimos juntos sin poder evitarlo comencé a llorar sin si quiera me había quedado dormido había visto todas las fotos que tenia de él, ahora había quedado dormido completamente sobre mi cama reproduciendo un video de ash y yo riendo al despertar, eso fue lo ultimo que paso en mi vida.

Una vida después

La luz del sol por la mañana en Japón era un poco molesta pero por alguna extraña razón cada amanecer me hacia sentir triste, abecés tenia sueños extraños de un guapo chico aunque jamás había podido ver su rostro pero corría detrás de el también acababa en una biblioteca quería saber que significaba aquel sueño así que había comenzando a tratar de encontrar la biblioteca con la que soñaba de vez en cuando, intente con cada una de ellas en Japón pero ninguna de ellas era después de un año me había dado por vencido por lo que fui junto a un reportero ibe-san a estudiar en New york antes de entrar a las clases fui un mes antes para familiarizarme en el lugar había ido como fotógrafo junto a el mayor el pronto consiguió el lugar donde haríamos el reportaje.

--¿estás seguro? —

Pregunto el mayor con un cierto tono de preocupación al ver que quería pasear por la ciudad siempre me cuidaba y se preocupaba para que no me pasara nada en el tiempo en el que estaría en este lugar, después de a ver hablado con el mayor logre que me dejara salir con tranquilidad sin que me acompañara a donde quería ir aunque realmente no sabia a donde era que se suponía que tenia que ir, por alguna razón la ciudad me hacía sentir nostálgico parecía que por alguna razón habían recuerdos en este lugar. Mientras caminaba me detuve por un momento al pasar frente a una gran biblioteca verla me hizo sentir mal pero no pude detener mis pasos entre a la biblioteca me quede estático al notar que era la misma biblioteca de mis sueños puse mi mano en mi boca pronto unas lagrimas comenzaron a salir mientras estaba viendo el lugar mire a alguien un chico rubio, de espaldas el momento en que volteo lo observé atentamente, sus ojos eran azules eran profundos y hermosos, su rostro era hermoso no sabia que hacer mi pecho se sentía oprimido el lugar me hacía sentir triste pero a la vez hacia que me sintiera en paz.

--- Hey, ¿estás bien? ---

Hablo una chica quien me había visto llorar en la biblioteca a si que me dispuse a salirme de la biblioteca casi corriendo no sabia como reaccionar en ese momento, el chico de la biblioteca era quien estaba asaltando mis sueños, sin poder evitarlo comencé a llorar parado en una esquina estaba nostálgico dolía mi pecho y se dificultaba un poco respirar un chico se acerco a mí, al alzar la cabeza era mas alto que yo tenía unos lentes puestos ligeramente moreno el pronto se preocupó, esto era extraño.

--¿oye estas bien?, puedo ayudarte tranquilo. –

Di dos pasos atrás no lo conocía, pero a la vez sentía que le conocía de alguna parte esto era más difícil de lo que había pensado venir a vivir en este lugar al final de cuentas no seria nada fácil, el seguía allí parado no sabia que decir mi voz se había ido por completo el entendió, pero no se retiro se quedo junto a mi no sabia por que lo estaba pasando en ese momento, pero ya pasado un par de minutos por fin había podido salir mi voz.

--estoy bien gracias...-.

El suspiro al ver que había contestado luego soltó una pegajosa risa baje la mirada un poco y por alguna extraña razón hizo que sonriera en ese momento.

---por un momento pensé que eras mudo. -

Eso me pareció gracioso era extraño apenas lo conocía, pero sentía que le conocía además era calmante estar junto a el mas alto, comenzamos a caminar hablando un rato hasta que por mi mente paso algo en el tiempo que habíamos estado hablando no nos presentamos ni un solo momento, ambos llegamos a una cafetería pronto entramos sentí mi pecho oprimirse de nuevo era el mismo chico de la biblioteca quien entro a la cafetería minutos después de que entramos.

---¡Ash! aquí ven con nosotros--.

Hablo el peli rosado quien alegremente agitaba su mano pronto como el rubio se aproximó a sí que mostré una sonrisa amable mientras el se sentaba junto a nosotros, aunque estuviera sonriendo aun sentía ese sentimiento de tristeza, mire a el rubio con detalle pero de manera discreta para no incomodarlo.

--- ¿te gusto? ---

Hablo refiriéndose a mi pronto desvié la mirada y suspiré ligeramente soltando después una ligera risa viéndole.

--si, ¿te molesta? -.

Bromee mientras el se ruborizaba y soltaba una estruendosacarcajada luego simplemente ordenamos las bebidas, los tres comenzamos aconversar pero antes de todo nos presentamos el peli rosa su nombre era shorterWong y el nombre del rubio era Ash Lynx ambos eran muy graciosos pero aun elsentimiento de tristeza aun estaba presente pero ¿Por qué?.

UNA VIDA DESPUES DE LA MUERTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora