One-shot Levi x lectora [ACTUALIZACIONES DEMASIADO LENTAS]

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(Inspirada en la historia de bakudekuforevercheck ESFUERZOS)

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Levi, debido a su conocido insomnio, se encontraba dando vueltas en la cama, con su habitual cara de matar a quien se ponga delante. Hace ya algún tiempo, le prometió a su novia que dormiría en la cama.

Pasaron aquel día juntos porque al capitán le dolía la columna, y fue ese día en el que decidieron ser pareja. Ahí, teniendo el suficiente derecho como para obligarle a algo por su salud, le obligó a dormir en la cama cada noche, y que si lo veía dormir en otra parte que no fuera una cama no le hablaría por un día entero, y aunque eso no parezca la gran cosa, Levi una vez la retó y ella no solo no le habló sino que lo ignoraba y hacía como que no existía. Ningún abrazo funcionaba, ni beso, ni cumplido, y al fin y al cabo, ese día era el primero que tenían de novios y el azabache quería mimos de su antes reciente novia, desde entonces tuvo ese miedo, aunque ya no estaba tan necesitando de sus mimos como entonces, le pilló un trauma.

Al ver que no dormiría a menos que tuviese sueño llegó a una conclusión: esa noche no dormiría por mucho que intentara. Se le pasó por la cabeza el aprovechar el tiempo y firmar papeles, permisos y de más, pero más de una vez se ha quedado dormido en la mesa por quedarse a firmar papeles, permisos y de más hasta tarde.

Se levanta y coloca una chaqueta que le compró ____ cuando volvió de Trost cuando fue a visitar a su familia y se asoma a la ventana. Hacía algo de frío.

Sus orbes se abren desmensuradamente al ver una figura entrenando, y no cualquier figura, la figura de su novia. Cierra fuertemente la ventana con enfado y sale corriendo, bajando las escaleras a una velocidad genial para ir con el torso al aire y solo cubierto por dicha chaqueta de algodón que no tiene cierre.

Se saltaba algunas escaleras, bajando de dos en dos. Cuando por fin sale del cuartel, va al lateral, el lugar que tiene de vista cuando se asoma a su ventana y la ve ahí, haciendo flexiones.

— ¡____! — la chica frenó en seco. Ese tono de enfado no le gustaba nada, y sabía exactamente quién era el dueño de esa voz que tan loca la traía.

— ¿Levi? ¿Qué ocurre? ¿Qué ha pasado? ¿He hecho algo malo? — preguntó a su novio, quien estaba ya al lado suyo, con la chaqueta que le regaló y un pantalón ancho y cómodo para dormir. Sabiendo de su enfado, no se molestó en acercarse, pues sabía que la alejaría.

— ¿"que sí has hecho algo malo"? Me obligas a mi a dormir en la cama y luego tu ni si quiera duermes. ¿De qué vas? —

— no pensé que te molestaría que entrenase de más, siempre lo he hecho. —

— y siempre me ha parecido una estupidez. —

— ¿una estupidez? — repitió ofendida. — ¿te estás oyendo? ¿Me estás diciendo que mi meta es una estupidez? —

— sí. — contestó seco. Ella solo sintió un nudo en su garganta y sus ojos llenarse de lágrimas.

— ¿de verdad piensas eso? — el azabache asiente, mirando fijamente los ojos de su novia, más alta que él. ¿Por qué le molestaba tanto si ya se lo habían dicho muchas personas? Su respuesta vendría ahora, y no le haría sentir bien. — me lo esperaría de cualquier persona, cualquier persona puede juzgar, yo le cerraría la boca. — dice tragando grueso. — pero que sea mi propio novio, la persona en la que más confío, quien me lo diga, duele. Duele como no te lo imaginas, capitán. — eso le cae como un balde de agua fría. No le llamaba capitán desde hace 2 años, un poco más del tiempo que llevan juntos. Ella recoge sus cosas. — pero si me lo dice la persona en la que más confío tal vez sea verdad, y deba rendirme de una vez. El esfuerzo no puede vencer al talento, gracias capitán por chafar en un segundo la fortaleza que me ha costado construir durante años. — y tras eso, se va, a paso lento y sin mirar atrás, al interior del cuartel, dejando a un azabache recapacitando en lo que acababa de hacer.

Había chafado no solo su sueño, había estrujado el corazón de su novia, y con ello, también el suyo. Cae de rodillas al suelo. Él solo quería mostrarle que se preocupaba muchísimo por ella, pero tal vez no fue la mejor manera.

Siente dolor en su pecho, en el lugar izquierdo donde se encuentra su corazón. Se sentía decepcionado consigo mismo y se odiaba en ese momento. Las lágrimas salían como niños de la escuela, sin parar hasta que no queden.

Soltaba gemidos de dolor. No quería perderla únicamente por eso. Definitivamente no quería. Ya habían tenido peleas de pareja antes, pero se arreglaron con un abrazo y un beso, pero esta pelea era diferente, y ambos lo sabían. Era la primera vez que ella le llamaba capitán después de tanto tiempo, y eso no puede ser bueno.

Su error sería difícil de perdonar, y él lo entendería si su relación ya no era como antes.

Se maldecía entre sollozos mientras golpeaba su frente con la palma de su mano izquierda, la diestra seguía apretando con fuerza aquel lugar que tanto dolía.

Y se pasó ahí, el resto de la noche, deseando despertar entre los brazos de su ____, y que todo esto solo era una pesadilla o una broma de mal gusto.