U N O

16 2 0
                                    

🐥; JIMIN

Era una tarde lluviosa, asistía a clases de danza contemporánea en el instituto donde estudiaba, claro, a mis padres les había dicho que mi taller era de piano.
Al parecer las alcurnias de mi familia le hicieron saber a mi padre de donde pasaba mi tiempo, sabía que a mi padre no le agradaría saber que bailo danza contemporánea pero eso es lo que me gusta, con los días el profesor de artes y yo nos volvimos cercanos, coqueteabamos.

Y ahí supe que realmente si, me gustaban los hombres, nunca tuve novia y no me sentí atraída por ninguna a pesar de tenerlas como pretendientes, pero lo supe gracias al profesor, aclaro que nunca tuvimos ningún acercamiento, solo coqueteos, miradas y arrimones, como ese día que se acercó detrás de mí tomando mi cintura y sujetando mi brazo, diciéndome que la pose debía ser así, en fin.

Esa noche, llovía y mi padre me gritaba pidiéndome explicaciones de una foto donde estoy bailando junto a mis demás compañeros y compañeras, era un evento..
No pude soportar retener mi llanto, pero la gota que rebasó el vaso fue.

–Solo los hombres marica bailan ese tipo de danza, acaso eres Gay? Yo no crié un...

Me gritó que dejara ese taller, no quería hacerlo, decidí no ser su dolor de cabeza y solo le respondí que no se preocupara por mí, que no quería que hiciera corajes por mi culpa.
Esa noche, salí de la casa sin hacer maletas, solo llevé el celular, documentos míos y el dinero que había ahorrado, es que si, no gastaba lo innecesario y logré juntar algo
Me fui entre la lluvia hasta llegar a la estaciones de autobuses, a mis 17 años fuera de casa..

–Soy Gay padre, no quiero ser una vergüenza para ti, nada de lo que hagas o digas cambiará quien soy... No me busques, por favor.

Me dolió dejar a mi padre y mi madre, de verdad, no supe de donde tomé coraje para hacerlo, pero estaba hecho y no había retorno.
Prometí no dejar que las personas me lastimaran, si mis padres no podían hacerlo, mucho menos algún desconocido debía hacerlo, por ello, tomar distancia era lo mejor.

Así fue como me fui de Busan, el lugar de donde provengo, afortunadamente me dieron buen dinero por el celular para completar, un boleto de autobus a Seúl.
Cuando llegué, a principio me dio miedo, no conocía a nadie, pero ya había decidido esto, así que sin más continué, por suerte había encontrado un lugar donde rentaban literas, económicos.

La primera noche ahí, tuve una vuelta inesperada, por mi físico me mandaron a hacer un favor, era ser un tipo de baile sensual.
La doña del hostal, me dijo que lo hiciera y que ganaría muy bien, a principio no quise pero realmente no tenía como sustentarme
Había un trato, mitad y mitad, solo sería baile, para ambientar despedidas de solteras, pero ninguna relación íntima, además a mi no me gustaban las mujeres.
las respetaba pero por nada del mundo tendría sexo con alguna
Pase un mes de esa manera, junté una cantidad considerable para comprar mi propia ropa, alquilar un departamento en una zona gente de nivel medio, por supuesto, no dejaría mis estudios tirados, entraría el siguiente año para estudiar en linea.

Ahora podía decidir que ponerme, a que hora dormir, que comer, sobre todo, que color de cabello tener, ya no sería el negro oscuro que mi padre me ordenaba a tener, probé con el rubio, encontré tintes temporales, estaba feliz.

Compré mi propio celular, de mañana era repartidor de comida, en la tarde Dormía o repasaba algunos temas que sabría que estarían en el examen de admisión, y en la noche era el trabajo, de 1 o 2 fiestas donde yo era el espectáculo, incluso tenía el llámese uniforme, vestuario negro, dependiendo la temática de la fiesta pero nunca faltaba la máscara dorada o plateada
Bailar de esa manera, lo más era que palmearan mi trasero y pusieran dinero en la tira de mi pantalón.

Apareciste Tú [YOONMIN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora