Los primeros días transcurrieron en una rutina agotadora. Aunque en el hemisferio norte la mayor parte del tiempo se encontraba a oscuras debido al efecto de la Noche Polar, Loki comenzaba su jornada de trabajo alrededor de las 7 de la mañana.
La primera tarea en la agenda que le entregó Thor, era recoger las cartas en la oficina de correos de la villa navideña. Tenía que leer cada una y luego de buscar en la base de datos, ingresaba en la lista de fabricación el juguete deseado por la niña o niño que se portó bien durante el año, y quien no, debí marcar su dirección para que recibiera una calceta con carbón. ¿Y así Santa se atrevía a decir que él era un maldito?
—¿Eres el nuevo pasante? —Le preguntó una elfa desde el mostrador de la oficina de correos.
—Así es. —Respondió cortante. Le habían hecho tanta veces la misma pregunta, que ya estaba cansado. A parte de Thor, no había otra persona de estatura promedio de toda la fábrica, así que era de suponer que él era el pasante de este año.
Aunque eso le llevaba a preguntarse sobre la familia de Thor. ¿Dónde vivía el antiguo Padre de la Navidad y su esposa? ¿Thor tenía hermanos, pareja o incluso hijos? Era un completo misterio.
Loki siempre lo veía trabajando en su despacho, o supervisando las labores en la fábrica de juguetes, y antes de que terminara su última tarea del día, Thor ya había desaparecido, ¿A dónde? Eso era lo que estaba dispuesto a averiguar.
—¡Termine! —Anunció digitando la última carta en su computadora y guardando todos los papeles, para arrojarse el cómodo sofá en frente de la chimenea. Era tanta la correspondencia que terminaba pasando un día entero solo en eso.
—Me alegra. —Santa le sonrió desde su despacho. Así como Thor le había dicho en un principio, casi todo el tiempo pasaban juntos y Loki tenía su propio escritorio contiguo al del rubio.
—¿Ya te vas? —No puedo evitar preguntar, cuando lo vio tomar su abrigo en el perchero del fondo.
—¿Eh? Sí, ya me voy a casa.
—¿Y dónde es?
—Bueno, como no has ido más allá de la zona de correos, y tú habitación está aquí mismo en mi despacho, creo que no has tenido la oportunidad de conocer toda la Villa navideña. —Habló Thor emocionado de entablar por primera vez una conversación con Loki. —Hemos terminado más temprano de lo habitual, si gustas podría hacerte un recorrido.
La propuesta se le tornaba demasiado emocionante como para dejarla pasar. No siempre se tiene la oportunidad de conocer el lugar de donde surge la navidad, y en compañía de tan guapo Santa Claus. Por que sí. Puede que en un principio la idea de pasar más de dos semanas como su asistente se le asemejara al peor castigo, pero cualquiera cambiaba de opinión con un sujeto como el rubio. Thor era completamente su tipo.
Comenzaron el recorrido con la planta principal donde se fabricaban los juguetes. Los elfos trabajan en jornadas de 8 horas, y divididos en grupos de tres. Así todos tenían la posibilidad de descansar, y la producción de juguetes no descansaba hasta la mañana antes de Navidad.
—¿Y dónde viven los duendes? —Preguntó sorprendido de la caridad de hombrecillos que corrían por toda la planta llevando y trayendo cajas de regalos y juguetes imperfectos. Loki calculaba al ojo por lo menos más de dos mil trabajando en ese momento.
—Bueno, para allá nos dirigimos ahora. —Thor lo tomó de la mano, y salieron por una puerta de emergencia.
Afuera el aire se sentía gélido, y la única luz que iluminaba el camino provenía de los farolillos ubicados en fila. El lienzo polar estaba iluminado por un sin fin de estrellas, acompañado a lo lejos por la aurora boreal.
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Pasante de navidad - AU Thorki
FanfictionThree-Shot - AU Thorki. »Lo que hiciste es imperdonable, Loki, así que por el poder que la navidad y el invierno me han conferido, yo te asignó este año el cargo de pasante navideño. -Antes de que Loki pudiera abrir de nuevo la boca, Thor prosiguió...