¡𝑇𝑜𝑐𝑎𝑑𝑜! 𝚃𝚞́ 𝚕𝚊 𝚝𝚛𝚊𝚎𝚜! _𝓣𝓪𝓰 𝔂𝓸𝓾 𝓻𝓮 𝓲𝓽_ [Vk]

𝙲𝚊𝚙𝚒́𝚝𝚞𝚕𝚘 8

Las pesadillas no habían cesado, una tras la otra, una peor que la anterior y todas en relación con lo que tanto le agobiaba al castaño, lo abrumaba de una forma que no se consideraba humana.

Llevaba semanas en lo mismo, si no despertaba de golpe en las noches sudando y con lágrimas en los ojos, despertaba por los forcejeos de sus amigos cuando éstos se preocupaban por las lágrimas y quejidos que soltaba. Esa calma que obtenía antes cuando hacía jardinería no existía, Jimin y Hoseok trataban de animarlo pero no funcionaba, su doctor trataba de ayudarlo a obtener esa paz metal que tanto anhela pero al contrario, se sentía hundido aún más en su propia miseria.

El pelinegro que lo había hecho sentir tanta paz, tanta tranquilidad con solo escuchar su voz, con solo el roce de sus dedos, algo tan... especial, había desaparecido mágicamente, solo tuvo la oportunidad de verlo unas dos o tres veces más antes que se desapareciera por completo. Tenía que admitir que el pelinegro le hacía sentir menos angustiado con solo mirarlo de lejos, parecía que irradiaba seguridad y tranquilidad, ahora ni eso estaba. Parecía que todo conspiraba en su contra para deteriorar más su existencia.

Ya ni siquiera tenía ánimos de comer, estaba más pálido que de costumbre y sus labios habían perdido ese tono rosáceo que tenían anteriormente.

"Desarrolló una profunda  depresión a causa de su profundo sentimiento de culpa."

Había escuchado las palabras de su doctor cuando la enfermera Hyunah había ingresado a la oficina después de su sesión, la pelirroja estaba preocupada por el estado del castaño.

Los pacientes diagnosticados con trastorno bipolar tienden a tener un progreso lento pero en el caso de Taehyung, el había presentado un desarrollo considerable rápidamente, pero ahora solo estaba el enojón y deprimido Taehyung donde anteriormente estaba el cálido y sonriente Taehyung.

El castaño ni siquiera podía fingir una sonrisa para no preocupar a sus compañeros, solo habían ojos tristes y pocas palabras que se reducían a monosílabos, frecuentemente pensado en la idea de acabar con todo.

Y últimamente estaba observando con detenimiento el grupo de llaves que tenían todas las enfermeras, con el fin de encontrar una oportunidad para poder obtenerlas y abrir la puerta de la azotea que había descubierto la vez que exploraba el hospital en las noches que se escapaba de su habitación, aquella puerta metálica, pesada y de color rojo que lo llevaría a la cura inmediata de su incertidumbre.

—TaeTae... come por favor... —Dijo la pelirroja en voz baja observando como el castaño movía la comida con la cuchara sin interés.

La enfermera soltó un suspiro, Taehyung no había querido salir al comedor desde hace bastante tiempo.

"¿Para que querría ir? Cada vez que intento comer algo quiero vomitar."

entonces ella llevaba su comida a la habitación en un intento de que Taehyung comiera un poco al menos, estaba mirando como el castaño se deterioraba cada vez más y eso la hacía sentir responsable de alguna forma, pero ella había sido perspicaz y notó que el estado de su paciente había empeorado desde que había dejado de ver al paciente Jeon Jungkook desde hace semanas.

Cuando le comentó esto al doctor Kim el hombre lo pasó por alto ya que su paciente y el paciente Jeon no tenían ninguna relación... ¿o si? En cambio, la enfermera había deducido que el castaño había desarrollado una mínima dependencia hacia la presencia de el pelinegro pero... ¿Porqué?

Quería descartar la opción de que haya desarrollado sentimientos por Jungkook pero esa idea siempre estaba en su cabeza.

Miró como el castaño llevaba otra cucharada de sopa a su boca y cuando la tragó hizo arcadas con intensiones de vomitar aguantando las ganas de hacerlo. Taehyung sintió una sensación tan enfermiza hacia él mismo.