Lo observaba y lo observaba, parado frente a la cama de ese chico de sonrisa cuadrada y cabellos castaños, era encantador sin duda.
Jungkook no había parado de verlo desde ese mismo instante en que notó su presencia la mañana en que Taehyung chocó con él, perdiéndose en esa piel dorada y facciones hermosas.
Con solo mirarlo sentía una sensación efervescente en su interior, una obsesión creciente. El castaño era hermoso sin duda, lo quería solo para él, quería mirar aquellos ojos marrones simples pero con un brillo único, admirar aún más esa sonrisa cuadrada que lo hacía sentirse como en el cielo mismo mientras admiraba a un ángel.
Llevaba un mes en la misma rutina, cuando no lograba verlo lo suficiente en la hora del almuerzo, o en la hora de los talleres recreativos del hospital, a altas horas de la noche se escapaba de su habitación, caminaba por los fríos y solitarios pasillos del hospital hasta llegar a la puerta de la habitación en la que el castaño se quedaba.
11:00pm. Sabía que esa era la hora en la que el personal médico se encontraba en la sala de juntas charlando o tomando café.
12:00am. Esa era la hora en la que el personal volvía a patrullar por los pasillos, atendiendo cualquier cosa que se presentase.
Por las cámaras del hospital no se preocupaba porque tenía a alguien en el hospital que se encarga de eso.
Jungkook tenía una hora, y eso era suficiente. Suficiente para admirar en silencio el rostro de Taehyung, suficiente para mirarlo por esa hora entera y se sintiese tan anonadado, estaba encantado. Era como si Taehyung le hubiese lanzado un hechizo desde que chocó con él.
Entraba en la habitación con cuidado de no despertar a su compañero y a otro chico pelinaranja que estaba durmiendo últimamente con ellos. Si, la sangre le hervía y la necesidad de estrangular a su compañero era enorme ¿Estaba celoso? Sí, lo estaba. Cuando miraba a Hoseok muy apegado a su amado la sangre le hervía.
Conocía a Hoseok desde hace un tiempo, nunca han hablado pero con solo ver a una persona puedes aprender a saber cómo es en realidad y a Jungkook no le simpatiza esa actitud tan imperativa, a Jimin también lo conoció cuando el pelinaranja intercambio unas pocas palabras con él cuando lo saludó en busca de ser amable, pero Jungkook no le respondió una palabra en lo absoluto.
En su rostro sin expresión se mostró una sonrisa cuando observó que el rostro de su amado se mostraba una pequeña sonrisa mientras dormía.
"Eres precioso Taehyung." Pensó Jungkook.
Soltó un suspiro y caminó hasta la cama donde descansaba el castaño, se inclinó para dejar un suave beso en su frente, miró el reloj que colgaba en la pared y éste marcaba 11:54pm.
Hora de irse.
Jungkook dirigió sus pasos a la puerta para irse, mañana disfrutaría de nuevo observar ese precioso castaño, se encargaría de saber hasta lo más mínimo de tan precioso ser y protegerlo de lo que sea sin importar que eso lo metiera en un problema grave.
•🐰•
Taehyung ya estaba acostumbrado a las incómodas sesiones que tenía con su psiquiatra. Seokjin había sido comprensivo y han estado evitando el tema sobre el homicidio de la señorita Eijing.
Pero al final Taehyung terminó accediendo a la terapia de conversación, no quería volver a los antidepresivos ya que sentía que en vez de avanzar en su recuperación estos hacían que se sintiera más enfermo o más sensible.
-Entonces.. Taehyung ¿Como te va en tu taller de jardinería? -Preguntó Seokjin al tiempo que le daba una revisada a los apuntes que tomaba sobre Taehyung en cada sesión.
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¡𝑇𝑜𝑐𝑎𝑑𝑜! 𝚃𝚞́ 𝚕𝚊 𝚝𝚛𝚊𝚎𝚜! _𝓣𝓪𝓰 𝔂𝓸𝓾 𝓻𝓮 𝓲𝓽_ [Vk]
FanfictionArte que no es arte, que no vale nada y que es insignificante. Y ahí estaban... Personas con trastornos mentales leves, que si bien pudieran ser buenas personas, la locura y la psicosis los llevaba de ser una obra de arte, a ser simple basura para l...