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Final del Trayecto: Ruta Ruka

-Ruta Ruka-

-Hace años atrás-

Ruka: Aprendí a vivir con bradicardia desde el jardín de niños, nunca fui buena para los deportes, nunca me pude permitir reaccionar a emociones fuertes ni hacer trabajos que requirieran de un mayor esfuerzo debido a mi enfermedad; por lo que toda mi vida mantuve un perfil como sí me tratase de un robot.

-En el jardín de niños-

Ruka: Sufrí de un ataque leve en mi clase de educación física y tuve que ser atendida en urgencia; desde ese día mis padres me prohibieron todo aditamento o actividad que implicaran algún esfuerzo físico y/o emocional. Me prohibieron los videojuegos, no podía saltar la cuerda con mis amigas ni asistir a clases de gimnasia, aunque siempre quise hacerlo.

-En preparatoria-

Ruka: Llevando este estilo de vida me fui poco a poco desacostumbrando a sentir emociones, dejé de comportarme como una persona con vida propia y me empecé a comportar como lo que siempre me hicieron ser, un robot, mis padres nunca me dejaron divertirme, salí en una ocasión con mis amigas a una montaña rusa, pero viví la experiencia casi como sí no estuviese ahí; ni siquiera podía tener novio, mi comportamiento tan opaco pasaba casi desapercibido ante los hombres y compañeros de clase; hasta que encontré una oportunidad que me podía hacer encontrar al hombre de mis sueños, ser una novia de alquiler.

-En el trabajo-

Ruka: Comencé a salir casi a diario con hombres jóvenes y de avanzada edad, falsifiqué mi edad para poder registrarme como novia de alquiler. En cada una de mis citas trataba de verificar mi pulsación para encontrar al hombre adecuado con el que pudiera sentir una emoción verdadera; los días y los meses pasaban, y nunca lograba conseguir un indicio de un cliente que pudiera hacerme sentir algo genuino, mi pulsación continuaba baja y mis emociones igual de monótonas, a veces trataba de darme por vencida, y asumir que mi lucha y deseos nunca podrían ser cumplidos. Ni mi madre ni mi padre apoyaron mi decisión, mis tías y mis tíos me motivaban a diario para continuar mi camino, y no dejarme oprimir por lo que me hiciera flaquear en mi caminar, a veces trataba de darme por vencida, pero una parte de mí no quería dejarlo, y lo seguí intentando con tal de conseguir aquello que tanto buscaba y no podía conseguir... hasta que lo encontré.

-En el puente-

Ruka: No era un cliente, pero el estar junto a él me hizo sentir como la chica que nunca pude ser a lo largo de mi corta vida estudiantil; cuando conocí a Tn, supuse que era un tipo superficial, alguien que buscaba llenar su vida con novias de alquileres y cosas superficiales como esas, pero me sorprendió ver lo equivocada que estaba al momento de acercarse a mí y sincerarse, aunque yo al principio me negué a escucharlo. Me salvo cuando caí de un puente, me demostró con lagrimas y dolor el amor que podía sentir por Chizuru y su ex novia al momento de pasar por ellas, y eso de alguna manera me hizo sentir algo que nunca antes en mi vida pude experimentar con un muchacho, mi corazón latió más rápido de lo que había latido a lo largo de mi vida, con él logré alcanzar las 70 pulsaciones, y solo fue cuestión de abrazarlo para lograr conseguir una pulsación de 90 latidos y darme cuenta de que él era el indicado para ser mi novio. Tn al principio se negó, ahora admito que fui muy persistente, entiendo que lo asusté, que fui muy impulsiva y demasiado inmadura al momento de hacérselo saber, pero me fue difícil controlarlo, nunca antes en mi vida había sentido una emoción como esa, al menos no de manera tranquila y sin riesgo recurrente; pero Chizuru logró entenderlo y me permitió salir con Tn, no me apena decirlo, no empezamos precisamente con el pie derecho; Tn trataba de acoplarse a mí, y yo lo perseguía a diario con mis celos y mis exigencias persistentes para que me aceptara como su novia, y me respetara con la fidelidad que yo tanto esperaba de él, hice muy mal, y ahora me doy cuenta.