autobús [l.s]

5

El fin de semana vino y se fue, al igual que su relación inexistente con George Lawther. Después de una cena bastante incómoda y promesas poco entusiastas sobre textearse, estaba claro que los dos no coincidían.

Louis lo encontraba ... aburrido. Era increíblemente agradable, pero le faltaba cierto encanto.

Mientras el aire de la mañana del lunes lo abrazaba, Louis acercó su libro de texto a sí mismo cuando el autobús llegó.

Una vez más, al llegar al único asiento libre, el ojiazul casi maldijo en voz alta cuando le volvieron a robar el asiento.

Levantó la mirada para encontrarse con los ojos de un conocido roba asientos. "Pedazo de mierda", casi gruñe.

Harry se rió, "Demasiado lento, Lou." Se reclinó cómodamente, levantando las cejas en desafío.

"Lo juro por Dios, te mataré", dijo Louis, golpeándose la pierna con bastante dureza. Pero no estaba tan enojado como la semana pasada. De hecho, tuvo que evitar sonreír cuando lo vio.

El rizado levantó las manos en señal de rendición, "Relájate, relájate". Y volteando a mirar una niña que se encontraba sentada a su lado, se inclinó y le susurró algo. Louis se preguntó qué estaba diciendo, pero antes de que pudiera preguntar, la niña pequeña se fue corriendo llorando hacia la parte trasera del autobús donde estaba su mamá.

Harry tocó con aire de suficiencia el asiento ahora vacío junto a él, "Oh, oye Lou, no te vi allí. Te guarde un asiento".

Louis lo miró boquiabierto, listo para gritarle por cualquier broma que acabara de hacer, pero sus piernas doloridas eran una prioridad, ¿y a quién le importaban los niños? Sin importarle de la forma poco ética de conseguirlo, Louis tomó asiento lentamente. "¿Qué diablos le dijiste a esa niña?"

Harry se encogió de hombros a su lado, "Que la última persona que se sentó allí tuvo piojos y murió".

Louis resopló, "Que creativo". Se reclinó contra el asiento y apoyó la cabeza cansada en la barandilla a su lado.

"Vaya, gracias", sonrió. "Entonces ... ¿cómo van las cosas con Lawther?" preguntó casualmente, jugando con las mangas de su chaqueta.

"No se", dijo Louis. Se encogió de hombros, "Supongo que no somos compatibles".

Por el rabillo del ojo, vio a Harry sentarse más derecho mientras inclinaba su cuerpo hacia el. "Qué mal", sonrió. "Así que está fuera del camino ahora, Louis Tomlinson, ¿Saldrias a almorzar conmigo mañana?"

Louis casi se ahoga con su propia saliva.

Era tan atrevido, tan impredecible, que Louis no estaba seguro de si sentirse halagado o disgustado. Pero su corazón latía con fuerza.

"¿Almorzar?" repitió como un idiota.

"Sí, ya sabes, la cosa donde la gente come alrededor del mediodía -"

"Sé lo que es el maldito almuerzo", espetó. Cruzando los brazos, se dio la vuelta. Por lo general, el no era así, desordenado y poco cooperativo. El ojiazul lo culpó a él: su rostro estúpido, su sonrisa molesta, sus modales inexistentes.

"Bueno, entonces almuerza conmigo," respondió, imitando su tono áspero.

"¡Bien!" las palabras salieron de su boca.

"¿Bien?"

"¡Que sí!" Louis resopló, evitando su mirada.

Se quedó en silencio durante unos segundos antes de echarse a reír. "Eres tan raro".

Louis rodó los ojos, pero sintió la sonrisa arrastrándose en su rostro. Hizo que su corazón se acelerara, lo hizo incapaz de pensar con claridad.

Pero se negó a dejar que él volviera a tener la última palabra.

"El almuerzo sería la oportunidad perfecta para asesinarte".

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nota: perdón por no terminarla, es que la fiesta de año nuevo no me dejó, y las fiestas de recalentado y todo eso:(

ya terminé de escribirla, solo editare, hoy mismo la subo toda♡