Uno

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Con la radio sonando de fondo, Bokuto Kotaro organizaba el que sería su nuevo hogar.

Se había mudado a un departamento que formaba parte de un pequeño complejo de edificios, en los principalmente habitaba gente mayor que de seguro llevaba toda su vida allí. Tenía 2 habitaciones, un poco pequeñas, un baño promedio y una cocina al estilo americano.

Había elegido ese lugar, pues era tranquilo, tenía varios minimarkets cerca y le quedaba cerca de la universidad, no debería moverse mucho para poder recoger a Kazumi de la guardaría.

Se había enterado de aquel lugar gracias a Kuroo, quién vivía junto a Kenma en ése mismo sector, solo que, en otro bloque, no era muy caro como para que lo pagase una sola persona, por lo que le pasó el dato y debido a la creciente incomodidad que llevaba teniendo con sus padres desde hacía un tiempo, movió un par de cosas y en dos semanas logró organizar todo lo necesario para mudarse.

Y allí estaba, en el comedor nuevo colocando las fotos que tenía con su familia en una estantería, quería recibir a su pequeña en un lugar acogedor, por lo que les había pedido a sus amigos que la cuidaran ese día.

Sacó de la caja una foto en la que salían Kuroo, Kenma y él con la bebé recién nacida y sonrío, el teñido tenía una cara de nerviosismo, pues era su primera vez cargando un bebé y sentía que en cualquier momento se le caería, Bokuto agradecía que aquello no hubiese ocurrido.

Recordó la tarde en la que le había confesado a sus padres que su novia estaba embarazada con melancolía, su vida había cambiado drásticamente desde que aquellas palabras habían salido de su boca.

Recuerda lo incomoda que fue la charla con sus padres después de eso, como tuvo que soportar las miradas acusadoras de sus compañeros de clase y sus vecinos, pero lo que más recuerda a la perfección son los ojos de sus progenitores observándolo con profunda decepción, suele creer, cuando el recuerdo vuelve a rondar por su cabeza como en aquella ocasión, que es algo que jamás llegará a olvidar por completo, el momento exacto en el que se había convertido oficialmente en la decepción familiar.

A ojos de todos él siempre sería el desafortunado chico que fue papá a los dieciséis años.

Continúo recordando cosas, hasta que sintió su teléfono vibrar en su bolsillo, se había sumido tanto en sus pensamientos que no sintió los golpeteos que daban a la puerta, por lo que al ver que su amigo no se dignaba a abrirle, Kuroo decidió llamarlo.

— Búho apestoso, ábreme la puerta — Se escuchó apenas contestó la llamada - Nos estamos congelando aquí afuera con Kazu, ¿cierto? — Se escuchó un agudo "Sí" junto con un castañeo de dientes algo fingido.

— Lo siento, bro, me distraje con algo — Respondió mientras se dirigía a la entrada.

Cuando cortó la llamada, abrió la puerta despacio, no quería ver a Kuroo a la cara, pues éste sabría que era en lo que se había distraído y le regañaría, pues el pelinegro consideraba una perdida de tiempo que recordase momentos de "las épocas oscuras", como le gustaba llamarle.

— ¡Papii! — Exclamó su pequeña apenas le vio.

— ¡Kazu!, ¿cómo la pasaste con el tío Kuro y el tío Kenma?

— 'ien — Sonrió y comenzó a hacer gestos intentando explicar lo que habían hecho durante el día.

Bokuto asentía como si entendiese perfectamente lo que le estaba diciendo, aunque realmente no le comprendía mucho.

— Ohhh, así que jugaste con él tío Kenma a la consola — La niña asintió y él lanzó una mirada acusadora al pelinegro, quién comenzó a silbar mientras miraba hacia otro lado.

— M' 'usta la 'onsola — Kazu no podía pronunciar los sonidos de la "g" y la "c" o "k" así que solía omitirlos de las oraciones.

— Pero eres muy pequeña para jugar con la consola, podrías romper el mando del tío Kenma y él se pondría triste — Explicó.

A Bokuto no le agradaba que Kazumi jugase con el teñido, pues creía que su hija al ser una niña podría romper el mando y no tenía el dinero suficiente como para comprarle otro a su amigo.

— Ahora ve a dejar tus cosas a tu nueva habitación — Sonrió y la niña hizo lo que dijo después de darle un beso en la mejilla.

Volvió a mirar a Kuroo y suspiró — Bro, sabes que no me gusta que Kazumi juegue con las cosas de Kenma.

— Pero a ella le gusta, Kenma no se enojaria si le rompiese algo.

— Recordemos la vez que me echó de su casa a las tres de la madrugada solo porque ensucie su Nintendo Switch con youghurt, por favor — El pelinegro rio.

— Quiere demasiado a Kazu como para hacerle algo así o siquiera enojarse, sabes que a cualquier otro niño lo echaría a patadas tan siquiera con verlo, ¡A ella hasta le creó un "Mii" en la Wii! ¿Sabes cuándo tardé yo en que me dejara crearme uno? Tres años y nos conocemos desde la infancia.

Ambos rieron un poco — Kuroo, una cosa es que se enoje y otra es que yo tenga para pagarlo en caso de. Con esto de la mudanza, la universidad y la guardería de Kazu, estoy justo de dinero.

— No te lo cobraría si llegase a pasar y con respecto a lo otro, recuerda que, si necesitas ayuda monetaria, nos tienes acá, a Kenma le ha ido sorpresivamente bien con lo de sus Streams en Internet y de ser necesario podríamos apoyarte.

Bokuto le miró a los ojos, no sería capaz de pedirle dinero prestado, su orgullo y la necesidad inconsciente de demostrar que podría salir adelante sin depender de nadie se lo impedía, no le dejaba ver que estaba bien pedir ayuda en ciertos momentos.

Dando el tema por terminado preguntó — ¿Te quedas a cenar?

— Está bien, gracias por la invitación, Kenma iba estar haciendo un directo así que cenaria solo— El pelinegro sonrió y entró al departamento.

La cena fue tranquila, bueno, tranquila en un nivel Bokuto.

Comieron Mac&Cheese con el televisor dictando las noticias de fondo, mientras Kuroo le enseñaba a Kazumi cuáles eran los gases nobles y que podía hacer frases con los símbolos químicos de algunos elementos de la tabla periódica, Bokuto reía ante la mala pronunciación de su hija, sintiendo un calor en el pecho le acarició la cabeza.

— Te'urio, Ame'icio y O'iheno, papá — La niña sonrió mostrando los dientes y Bokuto pensó que no quería dejar de ver esa sonrisa nunca.



Telurio (Te) Americio (Am) Oxígeno (O)

Pack de dos | BokuakaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora