Casada Con El Idiota De Mi Clase (Jungkook & Tu)

6.

¿Sabes ese sentimiento que te dice a gritos un "él es el indicado", pero tienes tanto miedo de todo lo que podría salir mal? Eso es lo que me pasa casa que veo a Hyung Sik. Porque él es maravilloso y sincero. Lo veo en sus sonrisas, en sus ojos, en su boca, en sus caras haciéndome sonreír cuando estoy triste, en su manera de protegerme, de cuidarme, en su manera de darme mi espacio y libertad cuando lo necesito, incluso antes de que yo me dé cuenta que necesita de éstos,para estar en paz, para estar bien.
Él me hace tanto bien que me da miedo. Me da miedo enamorarme y volver a salir lastimada, me da miedo que las cosas salgan mal entre nosotros y lo pierda. Tengo tantos miedos, pero ese es el más grande....el perderlo.

—Entonces yo le dije que iba a tirar la pelota a la izquierda, papá, ¿Sabes qué me dijo? ¡Que creyó que me estaba dando dolor de panza! ¡Que no entendió mis señas! -oigo a mi mamá soltar una carcajada y a mi papá morder su labio parar evitar reír, mientras Mark cuenta su relato en su entrenamiento de fútbol-

—Debemos practicar entonces las señales que empleas, campeón -lo consoló mi papá con una sonrisa y prosiguió a revolver el cabello de mi hermano menor-

Esta noche estábamos todos sentados cenando, pero yo no podía evitar pensar en Hyung Sik y más Hyung Sik. Al parecer mamá se dio cuenta que no estaba hablando, ni prestando atención a los temas de conversación desde hace un buen rato, porque soltó el tenedor, y puso toda su atención en mí con una sonrisa amable y maternal.

—¿Sucede algo, cielo? ¿Algo que quieras hablar? ¿Contar? -pronuncio cada palabra con voz cuidadosa, tanteando terreno, pero al hacer eso, la atención de papá también se vio en mi, al igual que su celo fruncido-

—Yo....solo....no es nada....me gustaría hablarlo contigo en privado, má. Ya sabes, cosas de chicas-mi madre me dio una sonrisa adorable, comprendiendo, mientras el gran Jeon Jungkook solo me miró ofendido-

—Se me hace una falta de consideración de su parte. Yo también puedo hablar de esas cosas. No tienen porqué dejarme de lado -un pronunciado puchero se hizo presente en sus labios mientras cruzaba los brazos sobre su pecho, ganándose una carcajada de mi parte y la de mamá-

—Claro, mi amor, como si eso fuera posible. No te ofendas -le dio un beso en la mejilla y continúo comiendo-

Cuando la cena acabo, papá y Mark subieron a sus habitaciones mientras mamá me pidió ayuda para levantar la mesa, pero sospechaba que solo era para hablar a solas, porque en otra ocasión hubiera puesto a papá a hacer todo esto.

—¿Sucede algo, hija? -por fin hablo, mientras lavaba unos platos y yo secaba otros-

—Es Hyung Sik, mamá -solte un suspiro, mamá siguió lavando, solo soltó un sonidito de comprensión-

—¿Sucedió algo malo con él? ¿Se ha portado bien? ¿Han peleado?

—No es eso mamá...es solo que, él es tan bueno, tan amable, es el chico perfecto y yo lo quiero mucho, me gusta, pero tengo miedo que me lastime o que las cosas salgan mal entre nosotros -dejo de lavar los platos, apoyo su cadera contra el fregadero y me miró a los ojos-

—¿Sabes? Sé lo que se siente, muchas veces pase eso con tu padre. Jungkook era alguien exasperante, siempre me sacaba de quicio. Y tú padre en su tiempo, no fue el mejor hombre, era un mujeriego y muchas veces llegó a lastimarme. Luego me case con Vernon, y Jungkook hizo su lucha, estuvo para mí en tiempos difíciles, incluso cuando Vernon y yo nos divorciamos. Yo tenía miedo, tenía miedo que las cosas no volvieran a salir bien, que saliéramos lastimados los dos. Pero comprendí, y tú también debes comprender, que a veces uno debe tomar riesgos. Todos le tenemos miedo a lo desconocido, tenemos miedo al que pueda pasar. ¿Te imaginas un mundo donde todos supiéramos todo lo que pasará en el futuro? ¿Qué sentido tendría así la humanidad, hija? En la vida nadie te dice que va a pasar mañana, o pasado, o dentro de un año, no lo sabes, tu tienes que hacer tu propio camino, esforzarte, arriesgarte, y si las cosas salen mal, bueno, lo intentaste, pero tendrás a tu familia, a tus amigos, aquí, para sobrepasar esos malos momentos. Nosotros nunca te abandonaremos, siempre estaremos aquí, por más que parezcamos ocupados, tu eres más importante para nosotros, que el trabajo.

Las lágrimas no se hicieron esperar, comencé a llorar y mamá me miró con esa mirada enternecida y compresiva. Extendió los brazos y yo corrí a abrazarla.

Mi mamá siempre a sida esa mujer que me sabe entender, que siempre está para mí y para Mark, es la mamá perfecta a mis ojos, y sé que no lo es, que tiene muchos fallos, pero ella se esfuerza mucho en estar a la altura, y yo lo apreció.

Sostuvo mi cabeza contra su pecho, acariciaba mi cabello dándome consuelo. Mi mamá siempre será mi ejemplo a seguir.