Encontraré un camino o haré uno

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Al día siguiente volví al hospital llevando una bolsa de lona llena de cosas para mi sesión con Javadd. Un reproductor de CD y una selección de música para ver si algo despertaba un recuerdo de él, junto con una colección de literatura clásica, los libros que más a menudo se asignan en la escuela secundaria.

El caso de Javadd no era el tipo de amnesia que resultaba de un trastorno neurológico o de una lesión en la cabeza. El suyo era un caso de amnesia disociativa, esencialmente una enfermedad mental que implica la ruptura de la memoria y la identidad, lo que hace que sea aún más fascinante. Sabía que la amnesia disociativa era provocada por un evento traumático y ocurría cuando una persona bloquea cierta información. Las opciones de tratamiento eran muy limitadas. Por lo general, se centra en aliviar los síntomas y controlar los problemas de comportamiento provocados por el estrés y el trauma. Ahora, los nuevos estudios estaban explorando la manera de ayudar al paciente a empezar a procesar y hacer frente a los recuerdos dolorosos.

Ya que nadie se había presentado a reclamar a Javadd, incluso después de que los medios de prensa tuvieran un día de campo cubriendo su historia, sabía que la terapia familiar estaba fuera. Decidí centrarme en el arte y la terapia de la música, con la esperanza de evitar entrar en el camino de la medicación para la ansiedad y la depresión que el Dr. Andrews parecía aprobar. Quería ver hasta dónde podía llegar con Javadd por mi cuenta. No creía que fuera útil adormecer el cerebro con antidepresivos.

La Amnesia disociativa es con mucho lo más interesante de estudiar porque los recuerdos aún existen en la mente, pero están enterrados tan profundamente que nunca pueden recuperarse. A veces los recuerdos reaparecen por su propia cuenta o pueden ser activados por estímulos del entorno de la persona.

El guardia ubicado en la puerta de su habitación del hospital comprobó mi identidad y asintió con la cabeza para que entrara. Abrí la puerta sólo para encontrar una habitación vacía. Dejé caer la bolsa en el suelo para detener la protesta de dolor de mi hombro, y estaba lista para caminar hacia el mostrador de la recepción a averiguar a dónde lo habían llevado, cuando una puerta en un rincón de su habitación se abrió y Javadd salió cubierto sólo con una toalla.

Su mirada se desvió a la mía y sonrió. Estaba demasiado aturdida incluso para devolverle la sonrisa, con la mandíbula colgando en el suelo y todo. Su cuerpo era una maldita obra maestra que podría fácilmente convertir a cualquier chica en una babeante adicta al sexo. Se veía brillante con las gotas de agua, y con esa pequeña toalla blanca colgando bajo en sus caderas, yo ya no estaba pensando en él como un sujeto de examen. Me imagine lo que sería tener las manos ásperas de Javadd en mi cuerpo, sentir el calor de su piel, respirar su olor y sentir la barba de su mentón contra mi mejilla.

—¿Ashlyn?

Me di cuenta de que sólo había estado de pie aquí, visualmente abusando sexualmente de él, Dios sabe por cuánto tiempo y estaba a punto de balbucear una disculpa, cuando se volteó hacia un lado y vi otro tatuaje.

Había algo familiar en la frase garabateada a lo largo de su caja torácica. Sin pensarlo, me dirigí hacia adelante y agarre sus caderas, girándolo para tener una mejor visión.

No podía ser.

Se rió de mí, susurrando en voz baja—: ¿Ves algo que te guste?

—Este tatuaje. ¿Sabes lo que significa?

Bajó la mirada hacia el texto en cursiva y negó con la cabeza. —No he tenido acceso para buscarlo todavía. Además, ni siquiera estoy seguro de qué lengua es.

—Es latín.

—¿Lo conoces?

Desabroché mis vaqueros y baje la cremallera.

Descíframe | Zayn Malik | Adaptada - HOT-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora