Capítulo II

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Punto de vista de Hanako.

Valla.... simplemente no podía quedarme de brazos cruzados y ver como intentaban llevársela hasta él, ¿No le bastó con quitarme todo lo que tenía? ¿No le bastó con dejarme allí tirado a mi suerte?¿No le bastó con verme sufrir?¿No le bastó con hacer sufrir a gente inocente?, y ahora viene a involucrar a ésta chica de cabellos color crema y putas verde azuladas que no tiene la menor idea de lo que está pasando en estos momentos y mucho menos tiene que ver con todo esto......debe ser algún tipo de broma mala, tengo que ir hasta allí y salvarla de esas malditas ratas traidoras, y descubrir la razón por la cual la trajeron a este horrible lugar. ¡Maldición! ¿¡Qué más quiere él ahora!?.

—Atrapen a la chica!—dijo una de las ratas—Ella es la chica que nuestra señora nos ah pedido!—decía la misma rata, tal parece que la asistente de ese idiota ordenó que la trajeran aquí.

—Señor, si señor—dijo el resto de su estupido ejercito.

Podía ver como todos ellos iban corriendo tras de ella con sus espadas filosas, mientras lo único que ella podía hacer era ir a la dirección contraria y pedir ayuda—como si alguien fuera capaz de escuchar—corrió y corrió y siguió corriendo hasta que tropezó, una maldita rata la atrapo y la cargo como si fuera un saco de papas definitivamente estos tipos no saben como tratar a una mujer tan hermosa como ella—bueno, no podía esperar menos de unas asquerosas ratas como ellas— no pude aguantar más.......tenía que ir a salvarla sea lo que sea que él quiera de ella no debe caer en sus manos, un sentimiento de ira me invadió cuando vi que ella aún trataba de salvarse sapateaba, grita y pedía ayuda, no aguanté más tenía que dar aparición y salvarla de aquel miedo que la estaba atormentando.

—Suelten la malditas ratas!—grite demandante.

—No lo haremos—escuche decir de una de las ratas tal parece que este era el supuesto "lider", y por el tono en que lo dijo iba en serio.

—Entonces.....si no lo hacen por las buenas.....tendrán que enfrentar las consecuencias—advertí mientras salía del lugar donde me encontraba.

Al salir de allí tal parece que me reconocieron, no les di tiempo de reaccionar y corrí lo más rápido que pude hasta aquella chica de cabellos color crema y puntas verde azuladas para arrebatar la de los brazos de aquella estupida rata, con un solo golpe de mi puño basto para hacer caer al suelo, la estreche entre mis brazos al estilo nupcial y llevarla a un lugar más seguro dónde nada malo pueda pasarle..... una vez me asegure que ella estuviera bien me dirigí nuevamente hacia las ratas.

—Les daré una ultima oportunidad de huir! Me han hecho enojar demasiado! Y no creo poder contenerme más!—advertí a las ratas.

—No nos iremos si esa chica y tú no vienen con nosotros—dijo la misma la rata.

—Entonces.....que así sea—dije mientras sacaba un cuchillo de mi saco—No me dejan otra opción que asesinarlos—amenace apuntando con mi cuchillo.

Después de lo que dije fui corriendo hacia aquel ejercito de ratas, una rata se aproximó a mi y lo apuñale en el estómago y luego le di una cortada en el cuello así por fin matándolo, las demás ratas se abalanzaron encima mío—que idiotas, pensaron que podrían ganar de esa forma, soy mucho más fuerte que todos ellos juntos—los golpee, volví a patear los y los apuñale, podía ver como la sangre salpicaba por doquier y se formaban charcos grandes de este líquido espeso de color carmín, fue así como hice caer a todas las ratas hasta que yo fui él ultimo en pie; guarde mi cuchillo nuevamente dentro de mi saco y trate de limpiarme la mayor cantidad de sangre que salpicó encima mío, no quería que cuando ella despertara me viera así de sucio. Cuando termine fui nuevamente hacia ella, quería asegurarme que no tuviera ningún rasguño al saber que se encontraba bien la levante nuevamente en mis brazos y me dirigí al portal por dónde entraron aquellas ratas y yo.

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𝑬𝒍 𝒄𝒂𝒔𝒄𝒂𝒏𝒖𝒆𝒄𝒆𝒔 𝒚 𝒍𝒂 𝒅𝒂𝒊𝒌𝒐𝒏❉
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