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Los meses habían pasado y apenas había sentido el tiempo pasar, lastimosamente no pude terminar las terapias con todos mis pacientes, tuve que resignarme a dejarlos a cargo de algunos de mis compañeros. En el transcurso de los meses encontré un buen lugar para hospedarme, faltaban tan solo un par de días para irme, había dejado de ir al hospital apenas hoy, fue mi último día y desde hace algunas horas me dedicaba a simplemente empacar mis cosas, acomode las cajas en alguna parte de mí no muy grande sala, etiquetando las cosas conforme a su fragilidad, deje una carga pesada en el suelo y me levante enderezando mi espalda, solté un quejido por el dolor del estrés acumulado en esta, no me había dado cuenta de que tantas cosas tenía hasta ahora, no vivía en un lugar muy grande después de todo, pensaba que iba a ser fácil y que no me tomaría mucho tiempo.
Conforme a mis relaciones amistosas, al contarles la noticia de que me iría a otro país no les tomó por sorpresa, o no tanta como pensaba, "Ya sabíamos que en algún momento te irías a otro lugar, nunca te ha gustado mucho vivir aquí después de todo" a pesar de que tenían razón nunca había sentido la necesidad de explicarme como en ese momento, y lo único que pude decir fue algo como "No me voy porque quiera huir de Latinoamérica, solo que me van a pagar mejor estando allá, no es una oportunidad que quiera desaprovechar" lleve mis manos a mi cara, mejor me hubiera quedado callada, tendría que haber dicho que los extrañaría o algo así.
Fuera como fuera ya había confianza, y no dudaba en que ellos sabían lo mucho que los apreciaba, a pesar de no dedicarles tanto tiempo como antes, talle mi cara con cansancio, entre el estrés de avanzar lo más posible a mi trabajo, encontrar un lugar para vivir, y dejar todo arreglado antes de irme no había dormido muy bien, además mis padres no se habían tomado la noticia de mi partida tan bien como yo esperaba.
"¿Estas segura de irte? ¿Así nada más? Pero estarás muy lejos, y no tenemos ningún familiar allá que con el que puedas llegar si tienes problemas"
"¿Por qué quieres irte tan lejos? ¿Tienes algún problema con alguien?"
Sabía que se preocupaban por obvias razones, a pesar de lo exitosa que estaba siendo en estos momentos de mi vida y de lo independiente que puedo llegar ser, la realidad es que detrás de todos estos éxitos se ocultaba una mujer torpe, miedosa y hasta cierto punto tonta, o al menos así lo consideraba yo, había momentos en los que podía superarme a mí misma y otras donde me sentía completamente perdida o desorientada, ya no lo consideraba un defecto, llevaba toda vida siendo así como para considerarlo algo horrible, simplemente son aspectos de mi persona que puedo mejorar. Volviendo a lo anterior, de cualquier forma, no es como que mis padres pudieran hacer mucho para hacerme cambiar de opinión, los planes ya estaban hechos y ya había progresado demasiado como para echarme para atrás, además, creo que el problema como tal era que aún estaban en su duelo, aun no terminaban de comprender o de procesar que ya no era una niña, y por más difícil que fuera aceptarlo, ya era una adulta y que actualmente soy más capaz que muchos de hacer las cosas por mi cuenta.
El sonido de mi celular me saco de mis pensamientos, al revisarlos era de la compañía de mudanzas con quien había hecho contrato, conteste la llamada volviendo a mi trabajo inicial.
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Finalmente estaba en el lugar, después de haber pasado la vergüenza de mi vida, nunca antes me había subido a un avión, y pensé que podría soportar un viaje directo de 21 horas, "No se siente nada cuando estas arriba" decían, "Te da sueño estando ahí, todo es muy tranquilo, solo lleva unos chicles para que no se te tapen los oídos" decían, ahora estaba en el nuevo departamento, totalmente demacrada, mi mandíbula dolía por haber masticado todo el viaje, mi esófago ardía por el vómito que causaron las náuseas y por si fuera poco, vomite en un basurero publico apenas toque tierra, mi cabeza dolía de lo mucho que me esforzaba por comprender a la gente, claro, tan solo habían sido 5 meses, y aunque había avanzado de forma considerable en el dominio del idioma, no era lo mismo estando aquí donde la gente hablaba más rápido y más naturalmente, sentía las nalgas adormecidas por ir sentada todo el viaje y para ponerle la cereza al pastel, detrás de mi iba un niño malcriado, un pequeño diablillo que estuvo pateando mi asiento más de la mitad de las horas que pase en el vuelo.
Pero al final estaba tan aliviada de estar finalmente aquí que mire el departamento con una sonrisa en mi rostro, no era muy grande, pero era lo suficientemente espacioso para una sola persona, había tenido suerte de encontrar un lugar tan bonito y a este precio, que a pesar de que en mi país hubiera sido impensable para mi vivir en un lugar tan caro, después de consultarlo con mi jefe me dijo que estaba bien, que el sueldo que recibiría aquí sería más que suficiente para sobrellevar los gastos, además de que sería beneficioso ya que quedaba cerca de mi lugar de trabajo, de varios supermercados y diferentes tipos de tiendas, así que no necesitaría ningún tipo de transporte en un buen rato, dejando mi equipaje de mano y mi bolso en el suelo justo en la entrada me encamine para acercarme a los grandes ventanales que separaban el balcón y ver fuera de mi nuevo hogar, a pesar de que la vista solo dejaba ver algunos edificios vecinos y múltiples calles para mí era una buena, y hasta cierto punto relajante.
Me di una vuelta por el lugar, tenía un cuarto de baño, donde también estaría la lavadora y artículos de limpieza, la cocina, un cuarto y la sala, donde estaba hace unos minutos, me senté un momento en el suelo de la sala, no había muebles, tendría que esperar a que llegaran mis cosas con la mudanza y esta no llegaría hasta mañana, y eso si todo salía bien, esperaba que al menos llegara en esta semana, ya que al inicio de la que viene tendría que empezar a laborar.
−Bien, ¿Y ahora qué? − Me pregunte a mí misma escuchando el eco en el lugar.
No era que tuviera que limpiar el lugar muy a fondo, estaba bastante limpio, a decir verdad, y no iba a dormir en el suelo, era bastante temprano, las 10:30 para ser exactos, quizá sería bueno ir a la empresa de telefonía e internet ahora, para que vengan a instalar todo eso, ya que ahora, con el número que traje desde mi país no me puedo comunicar, y mis padres se preocuparían si no llamo en las próximas 24 horas.
Me levante nuevamente para ir al cuarto de baño y darme una ducha y alistarme para salir, claro, estaba cansada, pero no era sueño, y si tenía tiempo ahora habría que aprovechar, para que no se me junten las cosas después.
