Retrograde (Larry)

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-Entonces… ¿Te gustó?

-Si, fue asombroso.

-Me alegro mucho. Espero que esto te haga bien.

-Es mi sueño, mamá…

-Vas a llegar muy lejos, pequeño mío.

-Gracias por estar conmigo.

-Solo intento verte sonreír… Creo que es la primera vez que te veo tan contento desde que tu padre murió.

-Y yo creo que es la primera vez que logras decir esa frase completa, y sin que se llenen de lágrimas tus ojos…

-Sí… bueno, es que quizás ya lo superé.

-Me parece fantástico eso, mamá. Deberías empezar algún curso o taller, conocer gente nueva, amigas, quizás un hombre…

-Harry…

-¿Qué?

-No sé si estoy lista para eso de nuevo, mi amor.

-No digo ahora. Sólo digo que tienes mi consentimiento.

-¿Que tengo tu qué? ¿Ahora me controlas?

*ambos ríen*

-Muy rica la comida, mamá. Me voy a mi cuarto a descansar.

-¿Tan temprano? ¿No quieres que veamos una película?

-Es que al ser el primer día, tantos nervios esperando el tren, más las dos horas de nervios mientras iba en tren, yo… estoy muy cansado.

-Está bien, cielo. Descansa.

-Gracias, igualmente mamá…

*Harry sube las escaleras, entra a su cuarto y toma su celular que estaba cargando su batería*

*Mensaje de WhatsApp, número que no está agendado.*

X-¿Llegaste bien? –en línea-

H-¿Louis?

X-¡Si!

H-¿Cómo conseguiste mi número?

L-Bueno, yo… em…

H-¿?

L-Cuando chocamos en la escalera y se cayeron nuestras cosas, se cayó tu planilla de ingreso y ahí estaba el número de tu mamá y el tuyo.

H-¿Y aún así con todo lo que hablamos no lo olvidaste? ¡Qué memoria!

L-Bueno, cuando algo me importa no suelo olvidarme.

H-¿Te importaba mi número de teléfono?

L-No lo hubiese guardado si no hubiera sido tan linda la charla contigo.

H-Bueno, lástima que te tuviste que ir. Otro día me gustaría hablar acerca de ti.

L-No tengo mucho para contar, así que mejor pregunta lo que te interese.

H-Bueno, comencemos…

L-Voy a responder todo con sinceridad.

H-Ok. ¿Padres divorciados o juntos?

L- Mi mamá murió cuando me tuvo, mi papá, bueno yo nunca lo conocí, y no sé si está vivo, o muerto, o escondido en alguna cueva, o en Alaska, jajaja…

H-Oh, lamento escuchar eso… ¿Y cómo te críaste y tuviste tan buena educación?

L-Mis abuelos.

H-Ohh. Y… acerca de tu padre.

L-¿Qué?

H-¿Tienes interés en conocerlo? ¿O al menos saber quién es?

L-No lo sé aún, creo que estoy listo para emprender una búsqueda, pero en este momento de vida no necesito ni quiero llevarme una sorpresa.

H-Entiendo… Y ¿Vives en Wollstadt?

L-No exactamente, pero no vivo tan lejos como tú. Apenas 40 minutos en tren.

H-¿Qué pueblo?

L-No es un pueblo, es el campo de mis abuelos.

H-¿En serio?

L-Sí, pero no pienses que es una granja. No es de esos campos llenos de animales que ves cuando viajas… Es un campo grande, porque mi abuelo trabaja la agricultura.

H-Oh… ¿Y solo viven tu abuela, tu abuelo y tú?

L-De hecho mi abuela y yo, mi abuelo casi no está en la casa, solo viene tres semanas al año, debido a su trabajo, y todo el tema de las exportaciones,  etc.

H-¿Tus abuelos de parte materna, verdad?

L-Obviamente, te dije que no conozco a mi papá, menos conozco a mis abuelos, jaja.

H-Perdón, fue una pregunta estúpida.

L-Está bien.

H-Bueno y entonces viven solo tu abuela y tú… ¿En una casa tan grande, no te aburres estando sólo?

L-¿Cómo sabes que mi casa es grande?

H-Bueno, las casas de campo suelen ser muy espaciosas.

L-Tienes razón. No, no me aburro. Es decir, yo paso la mayor parte del día en Wollstadt.

H-Oh, cierto que estás en tercer año.

L-Sí, pero recuerda que tengo tu edad.

H-No lo olvido. ¿Por qué te importa tanto que sepa eso?

L-Para que no creas que soy un pedófilo.

H-Tranquilo, no lo creo.

L-Me tengo que ir a dormir.

H-Yo también, nos vemos en siete horas.

L-Sí. Me gusta ser tu amigo.

H-A mi me gusta ser el tuyo.

L-Nos vemos.

H-Adiós.