Eso de tener buena memoria no es una bendición.
Es todo lo contrario.
Pero, dejemos de hablar de ti y
pasemos a hablar de mi.
¿Recuerdas que me gustaba pintar?
Aprendí a hacerlo.
Ahora pinto hermosos paisajes
en los que me pierdo volando sin parar.

ESTÁS LEYENDO
Trozos cascados.
PuisiLas personas se van. Y te destrozan en el proceso. Pero aprendes a vivir sin ellos.