... 3 ...

5.9K 607 156
                                    

Digamos las cosas como son

- Mierda esto es ... muy bueno ... ahí ¡ahí!

¿Dónde se supone que había estado ese hombre toda su vida?

Durante tanto tiempo que estuvo buscando el pene perfecto, y que por fin lo encontrase era un jodido lujo que muy pocos se daban, y creer que él fue uno de esos afortunados, hacía que su interior se apretase más alrededor de esa polla. Sus gemidos aumentaban cuando sentía las gruesas manos amasaban su trasero, lo más increíble era de que no solo recibía atención en su parte baja, sino que incluso sus pezones eran ferozmente besados por unos labios cálidos que se apegaban a ellos.

La posición en la que Zhan había estado más de una hora, fue con los glúteos levantados, la cara enterrada en las sabanas, junto a sus muslos empapados de semen, los gruñidos por parte del contrario, sentir la vibración del pene que cada vez llegaba más profundo, junto al descontrol de las embestidas, provocaba miles de sensaciones en Xiao, al principio no podía definirlos con claridad, pero luego ese dolor fue tornándose cada vez más placentero.

- S ... si ... sigue ... ah ... vamos ... lo ... nece .... Necesito – Alzó aún más sus caderas con la intención de ser follado hasta su estómago, y con un fuerte jadeo, una especie de cuerda lo estaba enlazando junto a la polla contraria, le era difícil respirar incluso cuando el otro chico dejó de moverse - ¿Qué pasa? ¿Tu cuerpo es débil?

Hasta que de nuevo, con un empujón certero en el punto dulce, Zhan cayó rendido y agotado, su sudor llenaba casi toda la parte de su frente, mientras más jadeos alborotaron la habitación, seguía preguntándose que tipo de expresión haría ese tipo, y si es que esto se volvería a repetir.

- Lo haces muy bien ... ¿pero no te gusta hablar?

Recibió otra estacada en su próstata, pero su máximo esplendor llegó con la entrada de algo duro en su agujero.

- ¡E-Espera! ¿Q ... QUE ES ESO?

La sensación era excitante, pero eso no justificaba la incomodidad en su interior, y al querer alejarse de esa especie de nudo que lo estaba jalando, sus caderas dejaron de moverse, lo cual fue notado por el que estaba encima de él, quien apretando la cintura de Zhan, dejó huellas moradas de sus dedos, y otra vez ocurrió ...

Saliendo con un fluido transparente para luego entrar con más fuerza y vigor, el otro no dejaba de golpear a toda velocidad la próstata de Xiao, su cuerpo se balanceaba de atrás hacia adelante, de una manera casi imposible para su posición.

- Hijos.

Solo esa palabra creó varios tipos de ideas en Zhan.

¿Será solo una simple charla sexual?

Al darse cuenta de que su pene se endurecía aun más al saber de que el hombre quería darle un hijo, Zhan solo le siguió la corriente.

- M-Mmh ... un ... bebé ... quiero que me ... me des un bebé ¡ah!

Unas últimas estocadas más, y finalmente una gran cantidad de semen lo llenó.

- Lo tendrás.

Hombre, tu apetito sexual es increíble.

08:36 Miércoles

Yibo ha estado muy liberal, mostrando muchos cambios.

El primero es que su aroma se ha intensificado, a tal punto en que hasta mis calzoncillos huelen a él (sin exageraciones), lo más extraño es cuando un día lo vi echado en mi cama, restregando su cuerpo entre mis sabanas.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 07, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cl0sed H0leDonde viven las historias. Descúbrelo ahora