La Manipuladora Del Silencio

Momento de Felicidad.

Capítulo 6

-¡No le eches sal, está perfecto!-grito Isabel a Rafa.-
-¿Que? No te oigo estás muy abajo.-rio Rafa, en respuesta Isabel le empujó mientras el soltaba carcargadas.-
-¡Eeh!Al final me cortó.-dijo Ithan mientras cortaba la cebolla, en medio de ese desastre de gritos y empujones Aiden se acercó a Isabel y la susurró agachando el cuello.-
-El juego no ha terminado.-sonrio Aiden mordiendo la oreja de Isabel.-
-¡EEH!¡Depredador alejate de la pobre niña indefensa!-grito Dani vacilando a Aiden, el cual respondió con una sonrisa y levantando los brazos.-Ponte a cortar cosas, lejos.-rio Dani, Isabel no pudo contener la sonrisa.-

Miró de reojo a Aiden con su camiseta de tirantes y su chándal gris, veía como cortaba ajo mientras ella daba vueltas a la pasta, vio como reía de perfil, sonrió al verlo y enseguida quito la sonrisa, el agua hirvió y se cayó un poco en la mano de Isabel.

-¡Joder!-grito Isabel apartando la mano del fogón en un rápido movimiento, enseguida Aiden se acercó a ella y metió su mano debajo de agua fria.-
-Dejala ahí, voy a por una pomada y una venda.-dijo Aiden caminando hacia el botiquín.-
-¿A que estabas mirando tan distraída?-susurro vacilonamente su hermano.-
-Nada me he embobado.-dijo rodando los ojos, viendo como el agua caía encima de su mano.-
-Ven.-grito Aiden desde el salón, Isabel camino hasta allí, se sentó en el sofá a su lado mirandole.-

Aiden cogió la mano de Isabel con delicadeza, le puso un poco de pomada y la extendió con cuidado, sus movimientos eran muy delicados, era como si temiera hacer un mínimo daño a Isabel.

-¿A que estabas mirando para quemarte?-sonrio Aiden pícaramente.-
-Me quede embobada con la pared.-dijo Isabel algo nerviosa.-
-Nunca me habían llamado pared, pero me sirve.-miro a Isabel a los ojos intensamente, termino de vendar a Isabel la quemadura.-Listo.

Aiden hizo el intento de levantarse e Isabel le cogió de la camiseta tirándola hacia ella dejando unos centímetros de separación.

-Creo que el juego a terminado.-sonrio Isabel alejándose de el, se levantó y camino hasta la cocina.-

Aiden se quedó sentando todavía impactado por lo que acababa de pasar, se mordió el labio y se levantó para poner la mesa.

Después de comer, hacia la tarde, se sentaron todos en el salón con mantas y palomitas, Isabel se puso al lado de Aiden ya que era el único sitio libre, paso su pierna por encima de la de Aiden, de reojo vio la sonrisa que Aiden intentaba disimular.

-Una de miedo.-dijo Ithan e Isabel le miró como si lo pudiera matar.-
-Si, que Isabel se pone graciosa.-dijo Rafa con una sonrisa.-
-¿Pero por qué?-dijo Aiden confundido.-
-Ya lo verás.-rio Ithan, terminaron poniendo Babadook.-
-¡AAAH HIJO DE PUTA!-grito Isabel en el primer susto fuerte.-

Abrazo el cojín que tenía entre los brazos, todos a su alrededor reían, de repente Isabel se asustó y se acercó más a Aiden, Isabel estaba totalmente cubierta por una manta, la mano de Aiden se encontraba a unos centímetros de la de Isabel, se volvió a  asustar y cogió la mano de Aiden, la apretó y apretó el brazo de Aiden, una sonrisa se escapó de los labios de Aiden, unos labios perfectos que daban luz a unos dientes perfectamente alineados.

Terminó la película e Isabel se había separado de Aiden hace un rato, todos se levantaron para recoger, Isabel busco una cerveza en la nevera, la abrió con el abrelatas y le dio un trago, echo la cabeza hacia atrás, su moño desecho empezaba a pesar, se lo rehizo y se bebió media cerveza encima de la encimera mirando por la ventana, en la otra mano tenía un cigarro encendido, veía el atardecer mientras llovía a mares, unos rayos de sol que salían de entre las nubes, era hermoso, una combinación de lluvia un tiempo triste con un atardecer que es hermoso se formaba según Isabel la perfección y más con una cerveza y un cigarro, para ella esos momentos eran felicidad, nunca había conocido a nadie, además de su hermano, que le hubiera dado un momento de felicidad como aquellos momentos.

Las nubes taparon los rayos de sol que luchaban por relucir entre el gris, pero no lo consiguió, Isabel vio como el mundo se oscurecía en aquella casa en la cual se respiraba tranquilidad, el humo se deslizó por su delgada cara, mientras oía la lluvia golpear violentamente contra la ventana, respiro profundamente hasta que sus pulmones se llenaron por completo de aire, distinguió un olor que le encantaba, notó como unos dedos se deslizaban a lo largo de su brazo, giro la cabeza y vio a Aiden.

-Parecias tan calmada que quería que me miraras pero no quería asustarte.-sonrio Aiden con su hermosa y estúpida sonrisa.-
-Dime.-susurro Isabel mirando de nuevo como las gotas hacían carreras para llegar al marco de la ventana.-
-Mejor te llevo.-sonrio Aiden pícaramente.-
-¿Que?-dijo Isabel y en un segundo estaba subida al hombro de Aiden.-¡Estás fatal!-grito Isabel mientras el reía.-¡No salgas!-grito viendo cómo Aiden abría la puerta del patio trasero.-

En cuestión de segundos se empaparon de agua, los dos reían como locos, bajo de sus hombros a Isabel, Aiden hizo un movimiento para echarse el pelo hacia atrás, mientras gotas de agua deslizaban por un mechón, Aiden veía como la barbilla de Isabel goteaba mientras ella reía.
En un segundo Aiden empezó a bailar con Isabel cómo bien podían entre la risa y el agua, en un tropiezo cayeron al suelo, en el césped mojado, Aiden sostuvo su peso para no aplastar a Isabel.

-¿Este era tu plan?-rio Isabel a centímetros de la cara de Aiden.-
-¿La verdad? Obviamente si.-rio Aiden viendo como los ojos de Isabel relucían.-
-Impresionante.-rio Isabel a centímetros de la boca de Aiden.-Vamonos, estamos helados.-dijo Isabel levantándose del suelo, entraron corriendo, todas la miradas se posaron en ellos dos, Aiden detrás de Isabel, goteando.-
-¿Que cojones?-rio Ithan.-
-Tengo frío.-dijo Isabel.-
-Ven te daré algo de ropa.-dijo Aiden, subieron las escaleras y entraron a la habitación de Aiden.-

Una habitación amplia, con una cama un poco desordenada, con un edredón que parecían nubes, tenía luces debajo iluminadas de azul, aunque todo estaba decorado de rojo, tenía varios premios de rugby en una estantería encima de un escritorio negro a juego con la moqueta, las paredes eran dos granates y las otras dos negras, era acogedor, tenía posters colgados y fotos.

-Si quieres cambiate en el baño.-sonrio Aiden.-
-Ya te gustaría que me cambiara aquí.-rio Isabel cogiendo la ropa de las manos de Aiden.-

Entró al bajo y se empezó a quitar la ropa, se secó el pelo con una toalla que supuso que era para el pelo, se colocó la camiseta que era enorme y los pantalones menos mal que tenían una cuerda por qué si no se le caerían, salió y vio a Aiden sin camiseta y con un chándal negro, secándose el pelo, Isabel se quedó sin palabras al ver el abdomen marcado y los bíceps de Aiden, su ropa engañaba.

-Eh emm me voy a abajo.-dijo Isabel tartamudeando.-
-Vale, y una cosa.-dijo Aiden.-
-Dime.-giro la cabeza.-
-Limpiate la baba.-rio Aiden.-
-Imbecil.-rio Isabel, bajo casi corriendo las escaleras avergonzada por lo que acababa de pasar, se sentó al lado de su hermano subiendo sus piernas a sus muslos.-
-¿Por qué estás rosa?-rio Ithan.-
-¡No estoy rosa!-grito Isabel.-
-Bueno, fiera.-rio Ithan.-

Isabel se tumbó en el sofá en ele, con una manta beige, estuvo mirando el móvil durante un buen rato, rodeada de cojines, los ojos se le cerraron poco a poco.

Isabel se había dormido por completo Ithan la miró respirar lentamente, se levantó del sofá y fue a ver qué hacían los chicos en la cocina, estaban Aiden, Dani y Rafa.

-Entonces, tu padre es militar.-dijo Dani mirándo a Aiden.-
-Los dos, mi madre es cirujana de trauma y mi padre es capitán de la armada.-dijo Aiden bebiendo de su cerveza.-
-Sorprendente.-dijo Ithan.-
-Bastante sorprendente.-rio Aiden esbozando una sonrisa.-
-¿Que tramas con la peque?-dijo Rafa.-
-Nada.-rio Aiden.-Solo estamos haciendo buenas migas.-sonrio Aiden cuando el pensamiento de el rostro de Isabel paso por su mente.-
-Es muy buena amiga, un día vino a mi casa a las 10 de la noche para ayudarme con matemáticas.-dijo Dani recordando los buenos momentos.-
-Tambien es buena melliza.-rio Ithan.-Esta para todo.

Aiden se le desvió la mirada a la cara calmada de Isabel, era tan pequeñita que le sobraba sofá en el cual si el se tumbaba no se le salían los pies por poco, su pelo se resbalaba por el sofá gris y la manta roja, estaba en calma, nunca había visto a Isabel así, sin gritar y sin sonreír, estaba...perfecta.