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¿Quieres que te ayude? — pregunté.

Jungkook llevaba bastante tiempo intentando hacer algo de comer, yo solo me limitaba a observarlo desde el otro lado de la pequeña isla que había en la cocina. Él iba de un lado a otro, buscando cucharas, cuchillos y algunos ingredientes de la heladera. Parecía bastante concentrado.

Jungkook, ¿te ayudo? — volví a preguntar.

No, estoy bi- ¡¡AAYY!! — gritó alarmandome. Sin dudarlo me acerqué hacia él y pude ver como se tomaba de la muñeca con su otra mano.

¿Que pasó? ¿Estás bien? — pregunte con obvia preocupación.

Me quemé, creo que el aceite estaba un poquito caliente dijo sonriendo un poco.

No me digas, mejor ven que te voy a curar

Está bien

Rápidamente fui hacia el baño, esta no era la primera vez que venía a la casa de Jungkook, así que podía decir con seguridad que el botiquín se encontraba allí.

Ya estoy acá, dame tu mano — le pedí.

Tomé la mano que se había quemado y comencé a limpiarle la herida. Por suerte la quemadura no había sido tan grave, por lo que solo le puse una crema.

Listo

Gracias — respondió a la vez que se acercaba hacia mí, y dejaba un casto beso en mis labios.

¿Y eso por qué fue? pregunté un tanto sonrojado, no lo iba a negar.

Simplemente quería hacerlo — dijo levantando sus hombros, a la vez que una pequeña sonrisa se formaba en sus labios — ¿Cocinamos? Creo que ahora sí necesito tu ayuda

Ahora me toca cocinar a mí dije tomando la sartén que había quedado en el fuego. Error, ya estaba todo quemado — ¿Qué quieres comer? Yo me encargo —

¿Sabes cocinar? — preguntó sorprendido, ¿qué si sabía cocinar? Jaja no.

— ¿Quién dijo que iba a cocinar? Era para pedir comida — dije sin importancia, aquello provocó bastantes risas en Jungkook.

Pide lo que quieras, a mi no me molesta

Esta bien

Una vez hecho ya el pedido, me acerqué a Jungkook y tomé su mano, obviamente la que no estaba lastimada, y lo llevé hacia el living. Hice que se sentara en el piso, apoyando su espalda en el sillón que había allí. Tomé sus brazos y me cubrí con ellos. La distancia entre ambos era nula. Podía sentir como su pecho se inflaba debido a su respiración. Tomé sus manos y las junté con las mías, era increíble la gran diferencia que había entre ellas. Mi mano era bastante chiquita a comparación de la de Jungkook. Por lo que para sacarme las dudas, compare una de ellas con la mía. Sí, de verdad eran mucho más grandes.

Tomé su mano lastimada y comencé a soplar en su herida, seguramente le debía estar ardiendo, tal vez eso le ayudaba a que dejara de hacerlo. En eso pude sentir como apoyaba su mentón en mi hombro.

— ¿Y esto? — preguntó.

— Simplemente quería hacerlo — respondí, copiando lo que había dicho anteriormente — ¿Te molesta?

Claro que no. Quedémonos así, me gusta — dijo a la vez que dejaba un pequeño beso en mi mejilla.

Kiss me - Jikook auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora