Llegamos

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- Bueno, chicas, mientras ustedes se instalan yo las voy a anotar a la secundaria que vi en internet, es la más cerca de aquí. Permítanme sus documentos así puedo anotarlas.

- Claro, toma.-dijimos a coro.

- Gracias.

Entramos a la casa y era, de verdad gigante. La entrad era una puertaventana enorme, por la cual se veía la cocina, cuya casi todos sus muebles eran blancos. Entramos y observamos cosa por cosa, había un pasa platos hacia el comedor, y luego la puerta hacia el pasillo que llevaba a las habitaciones. Eran tres, pero por el momento solo usaríamos dos, ya que Lili y yo dormiremos en la misma.
Fuimos por las tres recamaras, elegimos la más grande, y comenzamos a instalarnos.
Rato después escuchamos la puertaventana cerrarse, era mamá que entro gritando: ¡Anna, Lili! ¡¡¡Quedaron en la misma clase!!!

-Esta bien mamaaa-grité desde la habitación.

Cuando miré mi reloj, eran las cuatro y media de la tarde, así que nos acostamos a dormir un rato, el viaje fue agotador.
Nos levantamos a las nueve de la noche porque mamá nos llamo a cenar, la cena eran churrascos con ensalada de lechuga y tómate. Luego de eso, aprontamos todas las cosas, ya que el día siguiente era nuestro primer día de clases.

Siempre adelanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora