Siempre adelante

Otra vez

- Amor, despierta.-dijo Jaden la siguiente mañana.- es hora de ir al colegio.

- ¿Qué día es hoy?-dije dormida.

- Miércoles,-toco mi panza.- debemos avisarle a la directora que estas embarazada.

- Y, ¿dejaré de estudiar?-pregunté.- ¡Jaden! ¡Mi madre me va a matar cuando se entere de esto!

- Hablando de eso, ¿no la has llamado?-pregunto Jaden.

- No, y eso voy a hacer justo ahora.
La llamé, y me atendió una grabación que habíamos hecho hacía varios años.
"Holaa, somos Anna y Lauren, en este momento no te podemos atender, déjanos un mensaje."

- Mierda.-dije en voz baja.

- Ya hablarás con ella cariño, tranquila.-dijo Jaden acariciando mi espalda.- Vamos levántate que de hace tarde.
Me levanté, me pegue un baño de agua casi hirviendo mientras Jaden preparaba el desayuno. Me vestí con unas calzas negras y una playera azul, en mi cabello suelto puse un broche blanco que conminaban con mis zapatos. Baje las escaleras y Jaden me esperaba con el desayuno, dos cafés y galletas con mermelada.

- Mmm... que rico se ve.-dije y me senté.

- Si, no sólo se ve, está rico.-sonrió.
Desayunamos, tomamos nuestras mochilas y salimos hacia la parada. Media cuadra antes de llegar vimos el autobús, así que tuvimos que correr para alcanzarlo. Nos subimos y nos sentamos en los dos asientos de la cuarta fila. Llegamos y todos nos miraban y susurraban: "mira, están juntos."
A nosotros no nos importaba, nos parecía raro que Britney no estaba allí para humillarnos. La primera clase era de Geografía, con la profesora Traney Lastley, rubia de ojos claros, algo gordita, simpática pero enojona. Tuvimos clases de inglés, matemáticas, dibujo y francés. Entre estas Jaden y yo estábamos juntos solo en dos clases. En el segundo recreo, fuimos a hablar con la directora.

- Señora, hay algo importante que le tenemos que decir.-dijo Jaden.

- Si digan.-dijo ella.

- Yo, estoy embarazada.-dije y baje la mirada.

- Necesito hablar con tus padres.-se paró rápidamente.

- Mi madre está en China y mi padre falleció.-dije y solté una lágrima.

- Oh, lo siento cariño.-dijo la directora.- Jaden seguirá viniendo y tu te quedarás en tu casa, el te explicará las clases y el año siguiente vuelves a estudiar, ¿está bien?

- Muchas gracias.-dijimos los dos y nos retiramos.