Niall –dije en un susurro viéndolo- Gracias por todo –dije con una sonrisa-
¿Gracias por qué? –pregunto viéndome-
Por todo lo que has hecho por mí, porque me salvaste ese día de que me tropellara, porque –me interrumpió-
______... –dijo viéndome- No sé que tienes tu, que haces que todo sea diferente, aun que no te conozca tanto, para mi eres única por ser como eres –me sonrió-
No sé qué decir –dije viéndolo estábamos muy cerca-
No digas nada –me sonrió un poco- Solo… cuéntame más de ti –dijo viéndome ¿Tierno?-
Está bien… -dicho eso me puse a ver el cielo y di un suspiro- Cuando tenía catorce años ya casi cumplía los quince, en la escuela había una chica que se llamaba Alison, como siempre con su grupito de amigas molestando a todos, en esos todos estaba incluida yo con Katherine, no le tomábamos importancia, hasta que un día nos pusimos a pelear con ella, obvio a palabras, bueno ella dijo que se vengaría y no nos importo y seguimos con lo que hacíamos, en la hora de receso ella fue al baño y yo me quede en el salón, unas chicas me agarraron en el salón de clases, me dijeron muchas cosas, luego me golpearon y se fueron, estaba preocupada por Katherine no sabía dónde estaba y que le había pasado, un profesor me vio y me empezó a preguntar y me llevaron a la dirección, mientras esperaba me fui a mi departamento, a buscar a Katherine, en ese tiempo tenía una nana, cuando llegue ella me vio y se asusto me empezó a preguntar muchas cosas, y no le respondía solo le preguntaba por Katherine, y me entrego una carta que me a mandaban los padres de ella, la abrí rápidamente y empecé a leer –trague saliva dificultosamente- La carta decía que Katherine estaba en el hospital en coma, comencé a llorar como loca, le suplique a mi nana que me llevara y lo hizo, los padres de Katherine me preguntaron todo y les dije lo que sucedió, fui a ver a mi amiga y estaba ahí con unos tubos, con moretes, y vendada de la cabeza, Alison la que le hizo eso no le hicieron nada porque pago mucho dinero, y así paso dos años en coma, sin mi mejor amiga –una lagrima salió de mi ojo derecho- hasta ahora –sonreí y limpie mis lagrima, mientras veía el cielo-
Que historia –dijo el dando un suspiro- Pobre tu amiga, pero lo bueno es que se recupero y está contigo –sentí su mirada en mi y lo mire-
Lo sé, ella me conoce perfectamente, es como que si fuera mi hermana, la quiero demasiado, siempre hemos sido grandes amigas desde pequeñas –le sonreí- Tenemos los mismos gustos en casi todo.
Me sorprendí cuando vi que tenías una amiga, porque nunca me habías contado de ella… Ni nada relacionado a ella, se mira que se llevan muy bien… -sonrió- son muy divertidas, y únicas –dijo con gran sonrisa-
Gracias supongo –dije viéndolo- Ella es como mi hermana, siempre me cuida al igual yo a ella –dije sonriéndole-
Qué bueno que a pesar de todo tu siempre seguiste con ella –me sonrió- ¿Es por eso que saliste rápido el día en que estábamos en el estudio? –me pregunto-
Si, es que ese día ella despertó y Salí corriendo hacia donde ella, no se acordaba de nada hasta después, le fui a ayudando a que recordara… Y por cierto perdón por haberte tratado feo ese día –dije viéndolo-
No hay problema –sonrió- Solo que si hubiese sabido no te hubiera entretenido tanto y tampoco te hubiera seguido hasta allá –soltó una risita-
Lo sé, pero aun no quería que lo supieras –dije viéndolo a sus lindos ojos azules-
¿Por qué? –pregunto viéndome confuso-
Porque digamos que apenas te conocía, y tampoco soy de andar contando mis cosas –dije viéndolo- Pero… no lo sé, contigo es diferente, aparte de Katherine eres la primera persona en contarle estas cosas –dije viéndolo y vi una media sonrisa en su rostro-
