Te ves muy linda
Gracias… supongo –dije tímida-
De nada _____ y no supongas nada porque si eres muy linda… nos vamos –pregunto dándome su mano, asentí con la cabeza y tome su mano, salimos del edificio y subimos al auto, condujo unos quince minutos, llegamos a un restaurante algo lujoso, y se estaciono-
Niall –dije viéndolo- ¿Qué hacemos aquí?
Vendremos a cenar –dijo más que obvio-
Pero ¿Por qué un lugar así?
Porque es un poco privado –dijo saliendo del carro para abrirme la puerta, bajamos y entramos a ese lugar, demasiado lujo, nos sentamos en una mesa de las que habían ahí-
Niall… es demasiado y debe de ser muy caro –dije viéndolo-
Eso no importa ____ deja de preocuparte
Gastaras demasiado por una cena… podríamos ir a comer pizza
-rio- Aquí no venden pizza –volvió a reír, una chica se nos acerco, y nos entrego la carta donde se encontraba el menú, todo era caro y demasiado, pedí una ensalada Niall pidió lasaña y bueno, pidió que trajeran una botella de vino-
Niall yo no tomo alcohol
____ el día de la fiesta tomaste alcohol con todos los chicos
Pero llevaba piña casi no fue la gran cosa
¿Entonces porque te dolía la cabeza?
Bueno… era mi primera vez
¿Enserio? –asentí con mi cabeza, en eso llego un hombre muy lindo, quien traía una botella de vino, me sonrió-
Quiere que le sirva un poco de vino –pregunto amablemente con una sonrisa y asentí con mi cabeza, vacio con un poco de vino en mi copa y luego en la de Niall para luego retirarse-
Entonces será tu primera vez tomando vino –dijo arqueando una ceja-
Además de eso muchas cosas más que no sabes –tome la copa entre mis dedos-
¿Qué cosas? –Pregunto y los dos tomamos un poco de vino aun que yo solo probé un poco-
Quizás luego… las cepas –me encogí de hombros, a los segundos llevaron la comida, nos la sirvieron y comimos hablamos un poco y así pasamos parte de la noche-
¿Vamos a otro lugar? –Me pregunto mientras tomábamos un poco de vino, asentí con mi cabeza-
Solo iré al baño –dicho eso el asintió y al llegar al baño, me mire en el espejo me retoque un poco el cabello, mi teléfono empezó a sonar, no me fije solo conteste.
¿Hola? –Supe que era una mujer ya que rio-
¿Piensas que Niall te hará caso? ¿Qué se fijaría en ti? En una chica, loca, suicida, de bajo nivel, gorda, que no tiene cuerpo, que además solo usa una ropa que deja mucho que desear –rio, las lágrimas estaban en mis ojos-
¿Quién eres? –pregunte tratándome de tranquilizar-
Soy Barbara niña… ¿Crees que Niall me dejo? Pues fíjate que no… el contrato termino pero nuestra relación continua –no pude mas colgué, las lagrimas seguían deslizándose de mis mejías, las limpie, tenía que confiar en Niall, no le creeré a Barbara, trate de tranquilizarme, ya me había tardado demasiado en el baño, salí y ahí estaba Niall-
¿Por qué tardaste tanto?
Es que el vestido se me quedo atorado en la puerta del baño –mentí-
Bueno… ¿Nos vamos? –Asentí con mi cabeza-
Nos fuimos del restaurante, subimos al auto y Niall empezó a conducir… No tenía ni la más mínima idea hacia dónde íbamos.
¿A dónde vamos?
Ya verás –sonrió- Ya casi llegaremos
No dije nada más y en cinco minutos Niall ya se había estacionado.
¿Llegamos? –solo me miro y no dijo mas, bajo del auto para irme a abrir la puerta, baje del auto y el cerro la puerta, tomo de mi mano y caminamos hasta un tipo mirador muy lindo, donde se podían ver las estrellas, un lago y unas cuantas bancas, había una pareja de chicos, y unos adultos, llegamos a una parte solitaria donde se veía un lago muy lindo-
Ahora si llegamos –me tomo de las dos manos sonriéndome-
Es muy lindo… -lo mire a sus ojos-
______ -susurro- Se que han pasado muchas cosas… que solo nos hemos besado y bueno no te he dicho que seas mi novia. Pero ahora aquí entre tú y yo quiero pedirte que seas mi novia –me quede perpleja con lo que me dijo, no sabía que decirle o bueno si- ______ dime algo
Si –dije abrazándolo y él me abrazo fuertemente-
No sabes que feliz me haces –dijo separándonos para luego unir nuestros labios, con un compas lento, lindo, suave, tierno algo inexplicable, el tenía sus manos en mi cintura y yo mis manos alrededor de su cuello, nos separamos un poco quedando nuestras frentes unidas, nos mirábamos a los ojos, estábamos muy cerca, comenzamos a movernos de un lado hacia otro, como bailando, se podía escuchar las notas de un violín sonar, acompañaba el momento, luego de unos segundos volvimos a unir nuestros labios con un beso cálido y corto, apoye mi cabeza en su pecho y seguíamos moviéndonos.
Pude ver que un señor tocaba el violín su esposa lo miraba muy tierna, luego nos detuvimos y nos quedamos viendo.
¿Tienes frio?
Un poco –dicho eso él se quito su saco, y me lo coloco en mí-
Vamos… te llevare a tu departamento –dijo cerca de mi oído, me abrazo por la cintura y así fuimos hasta llegar al auto, empezó a conducir, hablamos un poco, sonreíamos-
¿Cuándo cumples años? –me pregunto-
Ah… en una semana… Creo –dije ya que no recordaba en que día y fecha estábamos-
-rio- ¿Cómo que crees?
Revisare mi teléfono –dije sacándolo y el rio- En seis días cumplo 18
¿En seis días? Pensé que faltaba más
Aún falta mucho –reí- además no hago nada para mi cumple
¿Enserio? Esta vez será diferente, celebraremos tu cumple
No… No me gusta –lo mire-
______ -alargo- De igual manera quieras o no lo celebraremos
Niall –alargue- No quiero que me hagan nada… solo quiero ver una película, comer pizza y dormir
No ______ Ya dije que celebraremos tu cumple años –dicho eso ya no dije nada, Niall se estaciono y luego salió del auto para abrirme la puerta-
Gracias por todo –dije mientras el cerraba la puerta-
No agradezcas –me tomo de las manos-
¿Te acompaño hasta tu departamento? –Asentí con mi cabeza y me abrazo por la cintura y nos dirigimos hasta mi departamento, abrí la puerta-
¿Quieres pasar? –Asintió y entramos al departamento, nos sentamos en el sofá-
¿Por qué no quieres que te celebren tú cumple?
No lo sé, nunca me lo han celebrarlo así que para que celebrarlo –reí –
Bueno sería bueno celebrarlo –sonrío- Aun que ya tengo una idea de cómo hacerlo
¿Qué idea?
Sera sorpresa –me sonrió-
No seas así… dime ¿Qué idea?
No te diré –me dio un beso corto en mis labios-
Bueno… ¿Te quedas a dormir?
Claro mi princesa –sentí que me ruborice por ese ‘Mi princesa’- Me gusta que te pongas rojita
Nunca me habías dicho así –lo mire a sus ojos- Sentí raro –reí-
¿Por qué raro? –rió-
