Vamos, Princesa, Vamos

Capítulo - 3

Desde ese día en adelante, no había vuelto a ver al príncipe heredero Qi Sheng. Escuché que después de dejar el Palacio Xing Sheng, se dirigió directamente al campamento militar central de Jiang -Bei.

Bueno, de esta manera también fue bueno. Honestamente, tampoco me he preparado bien sobre cómo enfrentarme a este jefe, tanto que incluso pensar en no reunirme toda la vida de esta manera fue bueno. Realmente quiero decirle a este hermano una sola cosa: por el momento, puedes sentirte a gusto e irte; Cuidaré mucho de estas bellezas palaciegas en tu lugar.

Al mencionar las bellezas, nuevamente sentí inmediatamente una sensación de tristeza. Estas bellezas suaves, delicadas como flores y refinadas como el jade, sin embargo, solo puedo mirar con impaciencia y ni siquiera puedo tocarlas, ¡oh, mi lamentable corazón!

El olor de un incienso aromático flotaba en el aire y me acosté en el sofá con una expresión tranquila, aunque me dolía el corazón.

La doncella del palacio, Lu Li, entró silenciosa y suavemente mientras llevaba un tazón de medicina.

Arrodillándose a mi lado, murmuró: "Su Alteza, es hora de tomar su medicina".

Miré hacia abajo para echar un vistazo a la medicina negra, y de repente sentí que me dolía la cabeza. En realidad, no me disgusta tomar medicamentos, pero pensando que al beberlos, mi busto se agrandaría, la cintura más pequeña y la voz más suave, sentí miedo.

Por lo tanto, miré a Lu Li con sinceridad, intentando negociar: "¿No podría beberlo?"

Lu Li pensó que no me gustaba el sabor amargo, así que me presentó un plato de mermelada: "Tengo lista esta mermelada de manzana con miel. Su Alteza puede comer esto y ya no podrá saborear la amargura".

Mi querido Lu Li, esta mermelada de manzana no tiene ningún efecto. Más bien, si me dejaras darte un beso, sería incluso más eficaz que una bandeja de mermelada de manzana.

Pero era solo algo que podía decir en mi cabeza. No lo habría dicho en voz alta, incluso si tuviera dos hígados.

¡Ai!

Al final, Lu Li todavía pudo obligarme a beber esa medicina. Luego me recosté en mi silla con una expresión tranquila.

En realidad, estaba haciendo planes para mi carrera como "Princesa heredera". Si pudiera ascender constantemente de una vez de princesa heredera a emperatriz viuda, sería mejor convertirme en una viuda joven.

Podría aprender de modelos anteriores como la emperatriz Lu Zhi o la emperatriz Wu Ze Tian y gobernar la corte desde detrás de las persianas, controlar el ejército y dormir sobre los muslos de mujeres hermosas.

(N / T: Lu Zhi era esposa del primer emperador de Han, Gaozu y Wu Ze Tian era una concubina del emperador Taizong de la dinastía Tang).

¡Sí, qué perspectiva tan tentadora!

Me sumergí en pensamientos profundos durante los siguientes días, pero todavía no pude llegar a una solución.

Mirando a todas estas bellezas caminando, finalmente no pude soportarlo más. Así que un día, después de haber terminado de comer, le dije a Lu Li: "Hoy, quiero salir en secreto del Palacio por un rato".

Lu Li era verdaderamente un confidente de confianza de Zhang-shi. Con solo decir eso, sacó dos piezas de ropa diferentes. En ese momento, me di cuenta de que ella era incluso mejor que yo para pedir favores.

Pero Lu Li, ¿por qué diablos sacaste dos atuendos diferentes? ¿No recuerdo haber dicho nunca que te dejaría ir conmigo?

Hubo muchas cosas que no pude decir en voz alta, así que dejé que Lu Li me ayudara a cambiarme de ropa antes de mirarme de nuevo frente al espejo. Mirando esos ojos vivos y coquetos, y ese pecho cubierto que parecía decir "cuanto más te escondes, más muestras", suspiré: Lu Li ah, Lu Li. ¿Son ustedes las mujeres las que son todas necias, o somos nosotros los hombres los que somos todos ciegos?