Capítulo 6: Magia

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Un día normal de trabajo. Gustabo patrullaba con Horacio mientras Conway y Volkov organizaban la malla y se encargaban del papeleo en comisaría.

Gustabo: Otro éxito más... - decía subiéndose al coche patrulla.

Horacio: Éxito tras éxito, Gusnabo. - le contesta a su amigo arrancando el coche.

Horacio: Por cierto, Gustabo... estos últimos meses estás más positivo de lo normal, ¿ha pasado algo o...? - pregunta curioso.

Gustabo mira a su amigo durante unos segundos, pensando en que ya es momento de decirle la verdad sobre lo suyo con Conway. El rubio estira la mano y apaga la cámara y el micrófono integrado del patrulla, para que no queden constancias que lo que está a punto de confesar, ya que nadie sabe de ello.

Horacio: ¿Porqué apagas las-

Gustabo: Estoy saliendo con alguien. - interrumpe el rubio.

Horacio: ¿En serio? ¿Quién? - pregunta intrigado el de cresta.

Gustabo: Con Conway. - suelta tan tranquilo, como si fuera algo sin importancia, restándosela él mismo al hacerlo porque realmente, aunque no lo admita, está nervioso.

Horacio: ¿Conway? ¿Papu? ¿El abuelo? - interroga intentando asimilar la información que acaba de recibir, mientras el rubio asiente con su cabeza.

Gustabo: De abuelo tiene poco, ya te lo digo yo... - sonríe de lado.

Horacio hace una mueca de desagrado por el comentario de su amigo, pero poco a poco acaba riéndose en voz baja mientras niega con la cabeza.

Gustabo: ¿De qué te ríes? - le pregunta serio, asustado por lo que pueda estar pensando de él y su relación.

Horacio: Nada, simplemente ahora entiendo muchas escenitas que he visto últimamente. Pero bueno, no te preocupes. Sé que te importa lo que pueda pensar de ti pero, nunca te juzgaría Gustabo, y menos por amar a alguien. Sabes que soy el primero que odia que le juzguen, jamás lo haría contigo, perro.

Gustabo se relaja y suspira. Mira a su compañero y le dirige una sonrisa sincera que transmite tranquilidad y un casi inaudible "gracias".


-


Ya había pasado un año, exactamente un puto año desde que Gustabo y Conway decidieron empezar una relación estable. Hoy era su aniversario. La verdad es que era algo a lo que no le daban mucha importancia, Gustabo nunca ha hecho caso a esas "chorradas" pero, con Conway sentía que era especial rememorar un día así, realmente le importaban los detalles cuando se trataba de ellos dos.

Conway por su parte tenía ya un pequeño regalo preparado para el rubio. Ambos habían acordado no regalarse nada porque acabarían gastándose mucho dinero por su estúpida competitividad. Habían decidido hacer un plan diferente y solos, con eso era suficiente. Pero Conway compró un regalo, porque no puede evitarlo y le da igual lo acordado, le quiere regalar algo a su Gustabín y nada ni nadie va a impedírselo.

Ya eran las 19:00h. Gustabo se encontraba en la habitación de Conway, prácticamente su habitación ya que se pasan todos los días juntos. Se estaba poniendo su outift de esta noche: sus vaqueros negros un poco rasgados por las rodillas, una camiseta blanca oversize y una chaqueta tejana también un par de tallas más grande, le gustaba ir a lo ancho. Conway le observaba desde la cama, estaba sentado solo con su pantalón de pijama puesto.

Conway: Qué guapo estás.

Gustabo se gira para mirarle de cara y le sonríe.

Gustabo: ¿Le gusta? - le pregunta, porque aunque sabe la respuesta, le gusta oírle decirlo.

LIMERENCIA - Intenabo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora