Una Epoca Confusas 2dos

Llegando a mi destino

Llegamos al lugar sin problema en el camino y eso que empesamo a jugar las adivinanzas buenos solamente Yuuta y yo porque Hitomi Tanaka no quiso jugar.

Y cada vez que hacíamos adivinanzas referidonos a ellas desenvainava la espada en forma de amenaza.

Cuando llegamos no encontramos con unos soldados samurái armados de pies a cabeza en la entrada de la montaña kurama yama.
- que viene hacer en este lugar.

Desenvainando la espada al igual que Hitomi Tanaka como siempre yo daba la paz.
- por favor chicos sin pelear mi nombre es Matías Sánchez González y venga en paz.

Miró a Yuuta Hoshi pidiéndole un paño blanco por no me entendía para nada.
- Matías para que quieres un paño blanco vas a llorar ó suplicar!
- no tonto es símbolo de paz
- ah!.... Tengo tengo uno negro toma.
- no negro es muerte no queremos guerra si no paz ere un tonto Yuu!
- déjesen de tonterías y lar...

Escuche la voz de kiyoshi riéndose a carcajadas cuando lo vi sentía alegría pero también cargo de conciencia.

Mire al suelo mientras el ordeno que nos dejarán entrar.

Los soldados se doblaron dando reverencia igual que Hitomi Tanaka y Yuuta Hoshi.

Los mire fijamente a ellos y aborchonado hice lo mismo que ellos el vino donde mí muy contento y medio un abrazo acariandome mis cabellos mojados por el sudor.
- me alegro que estés aquí conmigo Matías.

Me despegaba de el  pero el volvió abrasandome muy fuerte.
- kiyoshi no están bien!...

El tenía la máscara puesta pero su ojos se veía muy brilloso de tanta felicidad.

Reacción dandome un beso en mis labios metiendo la lengua en mi boca mordiendo mi labio inferior.

Lo empujó tapandome la boca muy aborchonado por lo que pasó.

Abrasandome de Yuuta mientras kiyoshi miraba mal al pobre chico.

- suertame Matías me van matar por tu culpa.
- ni de coña te suerto ere mi seguro de vida.
- sabe no entiendo eso de seguros de vida.
- después te explico!

Fuimos con kiyoshi tu vimos problemas los monjes Yamubushi no quería a Hitomi Tanaka porque ella es una hechicera.

El lugar es sagrado y no estaba permitido los impuros.
- como quieras no viene a quedarme solo cumplía orden de escoltar a los chicos mi deber a sido cumplido!.

Salí detrás de ella muy triste a pesar que no la conozco bien.

Me encariñado con ella y me sentía triste dejarla sola ya que Yamamoto Yoshida nos habandono.
- no te vayas que va hacer de tí.
- no te preocupes estoy bien me quedaré cerca no pienso dejarte.
- Ujum!.... Sí gracias los vemos!

Nunca había visto la tranformacion de una hechicera pero hoy la vi se convierte en un ave fénix y se fue volando.

WoW muy impresionante cuando miro veo a Yuuta Hoshi doblado en el suelo llorando.
- que te pasa Yuu!
- Ash!... Matías... Jam!
- porque llora que te paso?!.
- estoy jodido mirá!!!....

Cuando miro era unos chicos uno tenía cabellos coloreados suelto, otro de cabello largo blanco en moño de coletas, otro su pelo negro lacio con medio rabo y a habían chicas muy guapas.

Había otra chicos calvo vestido de monjes ahora entiendo porque el sería monjes.
- lo dices porque vas hacer monjes verdad.
-Siiiií!
- y con todo respeto que se merecen los monjes es que son calvo.
- Noooooó!
- y sino es por la calvicie porque es?
- que son chicos guapos no voy a poder aguantar mi tentación.

Ya me estoy imaginado haciendolo con el, con este, con aquel, con el otro, contigo y con los calbitos en incluso con kiyoshi.

No tiene remedio asta a mi me lleva enredado en su imaginación promiscuo.
- amigo te as jodido... pero tienes algo bueno no tuviste imaginación con las chicas.

Las chicas me miraron mal y kiyoshi se reí a carcajadas limpia escuchando lo que le decía a Yuuta Hoshi.
- buenos monjes Yamubushi ya sabemos dónde ubicar a Yuuta Hoshi en la habitación de las chicas.
- Noooooó! Jajaja ammm dile que no dile que voy a dormir contigo Matías.

Sa le corriendo habrasandome kiyoshi gritando a Yuuta.
- ni de coña! .... Lo siento monjes Yamubushi por mí reacción.

Los monjes se miran de unos a otros respirando hondo sin saber que decir pero uno rompió el silencio.
- hermanos estoy va hacer una tortura?!.
- es lo que decidió la diosa Amaterasu Okami y no la podemos desobedecer.

Los demás respiraron a corro mirándola fijamente unos a otros.