[10] FINAL

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El ambiente del lugar estaba lleno de voces adultas conversando y algún sonido de teléfonos celulares. Jongho estaba sentado observando el escenario impaciente mientras miraba el reloj de su muñeca, era casi la hora y podía ver algunas pequeñas cabezas asomándose por las cortinas de vez en cuando y a él solo te tocaba sonreír.

Abrió su celular para enviar el último mensaje mientras veía a una señorita acercarse al escenario con el micrófono y las luces comenzaban a ponerse tenues.

-En unos minutos vamos a presentar la siguiente función-

Las voces se hicieron más fuertes y Jongho solo suspiró reposando sobre las sillas mientras su preocupación aumentaba. Los segundos pasaron y antes que las cortinas fueran a abrirse, noto como una figura conocida se sentaba a su lado.

-El trafico es horrible- mencionó en un susurro mientras acomodaba algunas cosas cerca de su asiento -¿Ya saldrá?-

-Sí, estaba preocupado porque no contestabas el telefono-

Yeosang sacó el celular para darse cuenta que lo tenía apagado.

-Ups-

La cortina se abrió y las palmas empezaron a sonar por todo el lugar. En ese escenario un conjunto de niños y niñas estaban con diferentes trajes, el día de hoy había el cuento de Hansel y Gretel. Jongho sacó su celular filmando mientras observaba a la peculiar niña de vestido verde hacer su mejor presentación.
Ante los ojos de ambos, fue un espectáculo, Sarang se había transformado en una niña de 4 años maravillosa, con un cara de angel pero una personalidad deslumbrante. Tenia alma de líder a su corta edad, hablaba como si fuera una adulta, a veces era un poco engreída pero tenía un corazón noble con sus compañeros.

La voz dulce y melodiosa al cantar era algo que definitivamente heredó de Jongho pero la singular belleza era cien por ciento de Yeosang. El rubio agradecía que la personalidad de Sarang no haya sido como la de él.

Fueron los mejores 10 minutos de sus vidas, aunque siempre habían momentos divinos con ella. Apenas todo terminó, los niños se tomaron la mano para despedirse y la pequeña no dudó en enviar un beso volado a sus padres.

-Quiero apretarle esas mejillas- exclamó Yeosang emocionado.

Debían esperar unos minutos más antes de poder levantarse e ir al salón donde todos los pequeños estaban abrazando a sus seres queridos. Jongho tomó de la mano a Yeosang caminando hasta la puerta de aquel lugar para ver a Sarang interactuar con los demás pero abandonando su conversación apenas se fijo en sus padres.

-¡Papá!- exclamó ella corriendo a abrazar a ambos, que solo alcanzaba a las piernas de aquellos dos. Y luego abrazo más a Yeosang mientras levantaba la cabeza -Pense que no ibas a llegar-

-Nunca me perderé tus hermosas presentaciones- dijo el rubio jugando con el cabello de ella.

-¿Tuviste un bien día? ¿Ella está bien?- pregunto mientras acariciaba el aún pequeño abdomen de Yeosang.

Este solo sonrió mientras asentía -Estamos bien-

-¿Quieres que vayamos por una pizza?- Jongho hablo emocionado y Sarang asintio dando pequeños saltos.

Ella se despidió de los demás en aquel salón y tomo la mano de sus padres para salir de la escuela mientras no dejaba de hablar sobre su día.

-Y el abuelo me hizo este peinado, aunque demoró demasiado- Sarang sonrio ayudando a abrir la puerta trasera del auto -La abuela dijo que mañana me hará una comida deliciosa porque no pudo asistir hoy-

-Me parece bien- Jongho asintio ingresando también al auto.

-Tambien quiero ir a casa de mi otra abuela el domingo porque prometí ir a jugar a casa del tío Wooyoung mañana temprano-

Vientre de alquiler [#JongSang] #ATEEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora